San Juan del Río, Qro.- Mariano fue el nombre que eligieron sus padres para bautizar a su primogénito, de la pareja formada por Luis Antonio Macías Trejo y Armida Siqueiros de Macías, quienes acercaron con conocimiento de causa a su hijo a las aguas del Jordán, para abrirle la puerta de la iglesia católica, dando este primer paso dentro de la vida cristiana.
El evento religioso en la Parroquia de San Juan Bautista, hasta donde llegaron los padrinos, doña Soledad Silva y don Víctor Ibarra… y el infaltable abuelo don Mario Siqueiros, que estuvieron atentos a esta iniciación al cristianismo de Mariano, con el que se le abre paso a los demás sacramentos que tiene establecidos la iglesia católica para sus fieles.
El evento fue sobrio, elegante y sobre todo solemne, y se llevaron matemáticamente todos los pasos de imposición de este sacramento, se vertió el agua en la cabeza de Mariano, fue ungido con el óleo sagrado, mientras sus padrinos y papás detenían la vela encendida que significa la luz y la fe, y él enfundando en un elegante ropón color perla que significa la pureza, cumplió cabalmente con el protocolo, para de ahí acudir a un salón de fiestas en la carretera Panamericana, para la convivencia social.
Ahí estuvieron todos, la familia de Luis Antonio Macías Trejo, la de Armida Siqueiros de Macías, y desde luego los amigos quienes felicitaron uno a uno al nuevo cristiano y debutaron de una extraordinaria comida mexicana, que permitió la charla y la tertulia en honor a Mariano, hubo pastel con identificación y dedicatoria, mesa de dulces y desde luego mucha algarabía.