Por: Margarita Sánchez.
La Codependencia es el trastorno psicológico que presenta el ser humano, en el que expresa una preocupación de manera inusual e inapropiada ante los problemas de las otras personas.
Las personas codependientes, en frecuencia toman un rol de ejemplo a seguir hacia los otros y de igual forma, creen ser los rescatistas o salvadores de quienes los rodean, influye en diversas áreas de la vida de los mismos, y se olvidan de sí mismos y sus propias necesidades centrándose en los conflictos de su familia, la pareja, amigos o personas que simplemente existen dentro de su sociedad.
Debido a la mención anterior, las personas codependientes se relacionan comúnmente con individuos problemáticos, con la finalidad de rescatarlos, y de esta forma, crear un vínculo o lazo que les una. Como resultado, el codependiente se deprime y frustra cuando se preocupa por el otro, se descuida de sí mismo, y en el momento la otra persona no reacciona como lo espera el codependiente.
La finalidad del perseverante apoyo que brinda el codependiente al otro, es crearle la necesidad de su presencia, y gracias a esto, se siente indispensable y cree que, nunca le abandonará. La gravedad de lo anterior, es que al no sentirse correspondido, puede dañar a la otra persona o atentar contra sí mismo.
Particularmente en las relaciones sentimentales, es muy sabido que a la persona codependiente le es muy difícil poner límites, y perdona todo aquello que es considerado incorrecto en las acciones del otro, debido a que codependiente confunde la obsesión y la adicción que siente por la pareja con un supuesto infinito amor que cree que todo lo puede.
El codependiente no tiene la voluntad de alejarse y terminar la relación enfermiza por sí solo, y comúnmente piensa que sin el otro, se derrumba su mundo.
Cuando el codependiente decide buscar ayuda psicológica, es cuando después de reconocer su estatus personal, puede cambiar su forma de pensar y vivir para terminar con la codependencia y no repetir patrones con futuras relaciones personales, sociales u otras personas.
Cabe mencionar que, existen diversos casos de codependencia en los que la persona permite situaciones de violencia física o psicológica, de acoso y humillantes, en ocasiones puede tratarse también de parte de familiares consanguíneos.