*** Hubo expresiones de cultura indígena, que ponen el dedo en la llaga para seguir preservando.
*** El Idioma que no se pierda, la medicina natural que se conserve, la gastronomía que trascienda.
Por Raúl Rosillo Garfias
El segundo festival de Cultura Indígena, fue todo un éxito y sobre todo fue tan extenso que pudieron participar las comunidades originarias y los estudiosos de la lengua y de las costumbres, pero además hubo extraordinarios espectáculos para toda la familia, gastronomía y artesanía que no podían faltar, fueron el marco de este gran evento que puso en marcha René Mejía Montoya acompañado de la rectora Teresa García Gasca.
A pesar del clima, no frio, pero si nuboso y lluvioso por momentos, los expositores el trabajo de cada área fueron sin duda importantes, en el Bothé se impartió la medicina antigua, la medicina natural, y en toda esta organización tuvieron que ver también los organizadores de la ya tradicional Feria del Maíz… del que también se habló, se presentaron, libros, se enseñó el idioma, se dieron conferencias y la participación fue muy extensa.
El colorido de los pueblos originarios se hizo presente, danzas, protocolos indígenas, medicina natural y gastronomía no se dejaron pasar por alto, y Amealco volvió a vivir en su cabecera, mucha presencia de visitantes, a tal grado que los hoteles y las cabañas de descanso prácticamente estaban al 90 por ciento de ocupación según datos recabados en la zona.
Los lugares más visitados, el mercado, las artesanías, y el museo de la muñeca, pero otros estuvieron en el Cerro de los Gallos, buscaron las cafeterías que ya hay, así como los lugares tradicionales para comer o bien el Moler o conseguir los quesos de San Nicolás de la Torre entre otros, o bien hacer el recorrido de las pulquerías.
