Por Edgar Padrón.
La mañana del pasado jueves se realizó la misa de cuerpo presente para despedir a Gerardo “N”, niño de 11 años que murió en su salón de clases tras recibir un disparo accidental por parte de un compañero, quien manipulaba un arma tipo pluma.
La misa se realizó en la parroquia de la comunidad de San Isidro Miranda, municipio de El Marqués, Querétaro hasta donde se dio cita la comunidad para despedirlo.
Sus compañeros y algunos niños acompañaron al pequeño con globos y flores blancas, para despedirlo en la misa.
La escuela primaria en la que iba el menor retornará a clases el martes, y la Secretaria de Educación, Martha Elena Soto Obregón, informó que se proporcionará atención psicológica conforme lo necesiten.
Salieron caminando de la iglesia para llegar al panteón donde la familia solicitó privacidad para llevar a cabo el último adiós a su hijo.