El día de ayer el Fondo Monetario Internacional publicó sus expectativas de crecimiento para México y de acuerdo a su visión el panorama es el más pesimista que hemos visto, pues sitúa el crecimiento para México en 1.2% que comparado con la misma perspectiva de la OCDE y del Banco Mundial que lo sitúan en 1.5% se ve mal, y muy optimista y lejano queda el indicador de BANXICO que aspiraba al 2.5%
Para que un país crezca se requiere inversión en los sectores que producen infraestructura y generan empleo, seguir empecinados en obras faraónicas que además se inauguran más por los reflectores que porque hayan sido terminadas, además de volverse una práctica común este sexenio, es una terquedad peligrosa en momentos en que debemos priorizar el gasto.
Esto nos debe preocupar a usted y a mí, porque el Gobierno gasta su dinero y el mío.
De la Inflación
En el marco de la 56ª Reunión de la Red de Ministros de Finanzas y Banqueros Centrales organizada por el Banco Interamericano de Desarrollo en Washington DC dijo: “México es un país que hoy privilegia las medidas de oferta a las medidas de demanda, por cierto, estamos observando con preocupación el fenómeno de inflación mundial, sabemos que en varios países esta inflación viene por el lado de la demanda, va a requerir unas dosis de aumentos de tasas de interés bastantes fuertes que creo presentan el peligro de causar impactos recesivos muy importantes”
Lo que explica que el combate a la inflación, que en ningún país del mundo está dando resultado; estén confeccionadas con tal desatino. En otro momento dijo, que el gobierno está impulsando la producción de maíz y frijol, lo cual suena bien, pero que al momento de implementar, pesticidas, fertilizantes y demás insumos para “impulsar la producción” de nueva cuenta hay que echar mano de productos importados y valuados en dólares y con su respectivo efecto inflacionario; por otro lado no por arrojar semillas y echar agua, surgen los frijoles y maíz al otro día; hay un periodo razonable de tiempo para ver el efecto.
La realidad es que seguimos entrampados todos, en todo el planeta y lo inteligente sería enfocar el gasto en creación de infraestructura y generación de empleos.
Los cubrebocas ya no son obligatorios
En realidad nunca fueron una estrategia del gobierno para combatir y/o mitigar el efecto de la pandemia, lo cierto es que muchas actividades económicas se verán afectadas positivamente con esta medida (gimnasios, restaurantes, estéticas, teatros, restaurantes, etc.) queda en nosotros cuidarnos y mantener buenas prácticas. Le comparto mi experiencia, desde hace años en las mañanas cuando salgo a la calle, uso cubrebocas porque descubrí que no me enfermaba de gripe como el resto de mis amigos y conocidos; se lo paso al costo, si le interesa su salud, hágalo.
Déjeme sus comentarios, para mí son muy importantes.
Mario Alberto Metacoach
Twitter @mhmetacoach