Sujeto amenaza a campeona mundial de frontón: ‘quiero tener tu cuerpo y hacerte mía’
«Al subirme a mi carro, veo una nota doblada y en la primera parte decía: «Para la más buena que me voy a coger». Con el hashtag #NiUnaMás, la deportista dice que ya se han abierto investigaciones y que no parará hasta que el acosador reciba su castigo.
La campeona mundial de frontenis sub 22, Diana Laura Núñez, denunció a través de su cuenta de Facebook que desde enero ha recibido amenazas de violación y asesinato. Ahora, en la madrugada del lunes 9 de octubre, el agresor rompió los vidrios de su auto y le dejó una nota en la que de nuevo amenazaba con violarla y matarla, por lo que Núñez decidió hacer público, con un post, el acoso al que se encuentra sometida.
«Como sé que lo vas a ver y quiero que lo veas, por lo que lo pondré público, quiero decirte que NO ME ASUSTAS, NO TE TENGO MIEDO, no estoy sola y hay mucha gente que me quiere, está conmigo y me cuida, y en dado caso que me encuentres sola, yo me sé defender», responde Diana, de 22 años, en su publicación.
Con el hashtag #NiUnaMás, la deportista añade que ya se han abierto investigaciones y que no parará hasta que el acosador reciba su castigo.
En la captura de pantalla que le hizo a uno de los mensajes que le han mandado, se puede leer:»Hola hermosa espero hayas recibido mi mensaje el que te deje (sic) en tu bocho (sic) es tu primera advertencia tienes 3 ya quiero tener tu cuerpo y hacerte mia (sic) no es juego no tengo vigilada (sic)».
En entrevista, la joven, quien reside en la ciudad de Saltillo, estado de Coahuila, relata que en enero comenzaron las llamadas y mensajes.
«Recibí una llamada en el gym, como a las 11 am, y no se me va a olvidar porque nunca me había pasado. Me preguntaron: ‘¿eres Diana?’, pero no me dijeron nada más. Asumí que en el fondo había como una película porno, por los ruidos, y colgué».
Diana asegura que los mensajes en Facebook le han sido enviados a través de diferentes cuentas, presumiblemente falsas, y que comenzaron a ser más agresivos cuando ella optó por no responder ninguno. «Las llamadas continuaron, también con amenazas ya subidas de tono», dice.
Pero fue hasta este lunes que Diana Núñez decidió hacerlo público, tanto para denunciar al agresor como para que el tema sea compartido en redes sociales y se haga visible la situación que confronta. «Al subirme a mi carro, veo una nota doblada y en la primera parte decía: ‘para la más buena que me voy a coger».
«Esto es una enfermedad en la sociedad»
Pese a que varios medios retomaron el tema y ya hay una denuncia interpuesta, la joven volvió a recibir este martes otra amenaza. «Ah, ¿no tienes miedo? Pues deberías tenerlo, mi amor. Nos vemos pronto».
En México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) estima que 2 de cada 3 mujeres mayores de 15 años han sufrido algún tipo de violencia. En el estado de Coahuila, en particular, el 34 % de la violencia hacia las mujeres se da en el ámbito laboral, lo que lo coloca en el segundo lugar, sólo después de Chihuahua.
En América Latina, cada día se cometen 12 asesinatos contra mujeres por razones de género, de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En México, y esto son sólo los datos registrados, se abrieron 1.390 averiguaciones previas por feminicidios entre los años 2013 y 2015, lo que equivaldría a uno cada 24 horas.
En medio de estos altos índices de violencia generalizada hacia las mujeres, algunos episodios individuales han conmocionado a la sociedad. Son esos, entre otros, los casos de Valeria, la niña de 11 años que desapareció tras abordar una ‘combi’ en el municipio de Neza, estado de México; de la doctora Jessica Pedraza, quien fue encontrada asesinada en la carretera Naucalpan-Toluca; de Mara Castilla, asesinada en Puebla, presuntamente por un chofer de Cabify; y de Anayetzin Fragoso, que apareció hace unos días apuñalada en un clóset en la casa de su ex pareja.
La valiente medallista asegura que no se puede normalizar este tipo de prácticas, porque «no son normales». «No es normal que te chiflen o te lancen piropos en la calle. Somos libres de vestirnos como queramos, de publicar en nuestras redes sociales lo que queramos, y eso no debe ser motivo de acoso. Debemos hacer conciencia todos. Tampoco hay que victimizarnos, pero hay que ser valientes y levantar la voz. Estar concientes de que esto es una enfermedad en la sociedad».
