Por Andrea Peña
Luna-25, primer sonda lanzada por Rusia hacia la Luna desde 1976, chocó contra la superficie lunar tras un problema ocurrido el sábado durante una maniobra previa a su alunizaje, anunció el domingo la agencia espacial Roscosmos.
La primera misión rusa a la Luna en casi 50 años, supone un fiasco para un programa espacial ruso lastrado por la corrupción y la falta de innovación.
“Tras el impulso para formar su órbita elíptica de pre alunizaje, el sábado hacia las 14:57 horas, la comunicación con Luna-25 se interrumpió”, detalló la agencia rusa en un comunicado.
Explicaron sobre las medidas tomadas el 19 y 20 de agosto para buscar el aparato y entrar en contacto con él, sin tener resultado, el aparato dejó de existir tras una colisión en la superficie lunar.
La misión Luna-25, destinada a darle un nuevo impulso al sector espacial ruso, se consideraba “arriesgada”, según había admitido previamente el propio jefe de Roscosmos, Yuri Borisov.
Frente a Vladímir Putin, el pasado junio, Borisov declaró que “las probabilidades de éxito de estas misiones se estiman en un 70%”.