*** El plan piloto del ciclo anterior dio buenos resultados, y ahora se aprovechará inclusive para promover el turismo.
*** La idea, que el productor salga ganando, y que a la vez la gente que visita estos cultivos, deje algo a la comunidad.
Por Raúl Rosillo Garfias
Este año y ante el éxito del experimento o el plan piloto, realizado en las zonas de temporal, el ciclo pasado de cultivos, volverán a sembrarse unas 200 hectáreas de cultivos alternativos, entre ellos el de Girasol, que resultó ser todo un éxito, siembras y cultivos que se aprovecharán para promover inclusive el conocimiento de las comunidades y sus bondades gastronómicas, dijo el Secretario de Desarrollo Rural Municipal, Roberto Jiménez Salinas.
Explicó, que el ciclo pasado cuando se puso en práctica, esta alternativa, de sembrar algunas otras semillas no propias de la zona, pero que a juicio de los técnicos y conocedores inclusive de algunos empresarios productores de aceite que conocen de estos climas y sus inclemencias, se aceptó sembrar más de 100 hectáreas, todas ellas dieron semilla y todas ellas tuvieron ganancias.
Ante el éxito de este experimento, este año existen ya inscritos en el programa y se pretende que sean entre las 200 o más hectáreas las que se siembren, pero también se intenta que la semilla quede debidamente vendía desde el depósito de la misma en las parcelas, para que los productores, estén seguros de que tendrán no solo ganancias, sino que no se quedarán con la semilla en la bodega.
A esta actividad productiva, se agregará la invitación a las amas de casa, para que cuando el cultivo de girasol esté en plenitud de florear, y que los paseantes se detienen y se meten a tomar fotografías a las milpas, que al salir de su sesiones de imágenes, se encuentren con que las señoras de la localidad les ofrecen los ricos platillos que con tanto amor y esmero preparan…
Esto es como una contribución y una promoción a la belleza de las comunidades, pero también que el turista el amante de las imágenes, se quede un rato más con los productores y conozca sus historias y goce de sus extraordinarios alimentos, y que a la vez se fortalezca la economía de cada lugar con la venta de sus manjares preparados por las manos mágicas de las mujeres del campo…termina diciendo Roberto Jiménez Salinas.