Con respecto a la marcha del sábado pasado no haré muchos comentarios, seguramente usted ya supo que se contaron los asistentes por varias decenas de miles, que hubo un pequeño grupo de violentos -seguramente infiltrados- que la policía tuvo excesos y que está documentado que hasta usaron machetes para “controlar” a los manifestantes.
La realidad de las marchas en protesta por la 4T y el oficialismo de MORENA distan mucho de las protestas que ellos mismos hicieron hace apenas una década.
He escuchado a mucha gente decir que la marcha la organizó la Generación Z, está bien, es cierto; pero debemos ver las cosas como son: Todas las protestas de aquí en adelante son por México.
Este país no le pertenece ni a una generación ni a un partido político ni a un avatar patriarca ni mucho menos, a un puñado de trasnochados ideologizados; este país es de todos, de los campesinos que siembran para comer hasta los que lo hacen de manera cuasi industrial; este país es de las madres buscadoras y también de las madres felices que están con sus hijos, es de los de izquierda sí, pero también de todos los demás, de las nuevas y viejas generaciones, de hombres y mujeres, de niños y ancianos, es de todos; pensar que es de unos u otros es exactamente lo que debemos evitar creer, para eliminar las divisiones.
La presidente debe tener mucho cuidado de no hacer “oídos sordos” porque le puede resultar muy peligroso; en marzo del 2018 AMLO dijo en el seno de la LXXXI Convención Bancaria que “si en las próximas elecciones hay fraude, se retiraría a Palenque, pero ‘a ver quién amarra al tigre’ «. Si pudiéramos decir que este personaje hizo algo bueno, sería que provocó, dirigió y logró un cambio suave, despresurizado de todo el enojo social que venía surgiendo desde la elección de Peña Nieto; pero duró no más que su sexenio y en muchos, de los que votaron por él, menos.
La presidente Sheinbaum heredó un Gobierno con líderes que no le son fieles sino a su antecesor, una economía frágil, mal llevada y cuasi quebrada; varios elefantes blancos que succionan demasiado presupuesto, heredó varios caprichos de su anterior Jefe como que funcionara el AIFA, la desaparición de organismos autónomos en especial el del INAI, la elección de jueces o la pertinaz presencia del ejército en casi todo lo que hace el gobierno -hay quien opina que esto fue un Golpe de Estado suave, pausado e institucional y hasta legal- pero sobre todo un rampante ascenso de la delincuencia organizada en todas las esferas de la economía y política nacionales, para ser más concretos heredó un estado con la sombra de un Estado paralelo e ilegal y lógicamente todo esto está pasando factura.
No, no bastan programas sociales, fue un enorme error cumplir caprichos y seguir con un plan que beneficia a sus diseñadores y las familias de un puñado de políticos marsupiales del erario, dejando de lado el clamor de ese pueblo al que dicen representar y defender.
Si la Sra. Sheinbaum hace “oídos sordos” la herencia que recibió se multiplicará y se hará más profunda la crisis de inseguridad y el Estado Ilegal y entonces nos llegará a todos, tarde o temprano; sin ir muy lejos, hoy mismo si usted tiene un problema legal, con el Gobierno a cualquier nivel o -Dios no lo quiera- de aplicación de justicia desde el policía de proximidad hasta un tema de juzgados, y no tiene conocidos, dinero o no milita en el oficialismo, podría ser una tragedia para usted.
Sin embargo, si la presidente diera un giro, si se convirtiera en la gran promesa que pareció ser al ser elegida por mayoría, si reivindicara sus ideales de justicia y recordara que ella también tomó calles, fue luchadora social y que se volviera congruente con sus palabras, este país tendría esperanza, ojalá que no haga “oídos sordos” aunque la evidencia nos indique que no será así.
Nos leemos la siguiente semana.









