*** Enojo en la sociedad politizada, más en la plantilla del alcalde electo, que hizo un pronunciamiento.
Por Armando Hernández Ochoa
Tal revuelo ha causado la designación del llamado contralor carnal por cuatro años en Tequisquiapan, cargo que a un mes de darse el relevo en el mando de gobierno en Tequisquiapan, recae en Mario Dorantes, abogado de profesión y un servidor público de mucha experiencia y prestancia sobre todo, lo que ha motivado serias expresiones de rechazo por parte de opositores a José Antonio Mejía Lira y un pronunciamiento muy serio por parte del alcalde electo Héctor Iván Magaña Rentería.
Por aprobación mayoritaria del Cabildo se propuso para que el Síndico Mario Dorantes sea el Contralor para ocupar el cargo por cuatro años más y sea el encargado de esta dependencia municipal, pero sobre todo para que sea el encargado de ser uno de los protagonistas en el proceso de Entrega Recepción, proceso que no se ha iniciado, pero que debe tenerse en cuenta que es algo natural que se realice, pero no con estas ventajas para intentar dejar amarradas las manos de quienes en adelante deberán de responder por la administración de los dineros del pueblo de Tequisquiapan
Los Regidores que se opusieron a este capricho del Presidente fueron Mónica Amado (Morena), Mario Ávila (PAN), y Eduardo Ruiz (Independiente) fueron los únicos que votaron en contra del Contralor que el Presidente Municipal Antonio Mejía propuso y prácticamente designó, por ser además de uno de sus grandes amigos, uno de los personajes de más confianza para el actual alcalde.