Después de tres años la novela de la venta del avión presidencial sigue sin resolverse, inclusive el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que éste aún no se ha vendido; no obstante, anunció que se pondrá en renta para bodas, fiestas, viajes, entre otras actividades.
Faltan algunos detalles para tomar esta decisión final, pero el avión será trasladado al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles para ser entregado a la empresa Olmeca-MMaya-Mexica, que será operada por las Fuerzas Armadas.
“Se va a entregar el avión para que puedan rentarlo y se utilice para que no esté sin volar y que pueda tener ingresos su renta para pagar sus gastos y mantenimiento. Ya tomamos esa decisión”, dijo en Palacio Nacional.
López Obrador explicó que la aeronave, que puede transportar hasta 290 pasajeros, según la configuración empleada, no será modificada para que aquellas personas que la renten para bodas, viajes u otras actividades, conozcan los lujos que fueron adquiridos por gobiernos pasados.
Al ser cuestionado acerca de si esta decisión significa que ya no se venderá el avión presidencial, el mandatario indicó que aunque se ha ofertado éste, aún no hay comprador debido a que es una aeronave “hecha a la medida”.