*** El Cerro de la Venta es un lugar icónico para San Juan, pero también es una protección para la ciudad.
*** Se reforesta solo, pero es lento y despacio, murieron plantas endémicas de cientos de años.
*** La erosión producto del viento, el agua y las invasiones que hacemos los humanos también lo deterioran.
Por Raúl Rosillo Garfias.
Las elevaciones que rodean todo el Municipio de San Juan del Río, son sin duda de gran importancia para la infiltración de agua al subsuelo, y es menester cuidar no sólo su vegetación y su fauna, también su riqueza interna que son las especies que muy poco se ven y quienes acostumbran caminar, asistir como ciclistas de montaña, no hay que desestimarlos, lo que pueden hacer en sus rutas son barreras cortafuego, pero también tienen la obligación de colaborar para reforestar estos espacios.
Los cerros de San Juan del Río, como la Venta, el Gringo o el de Santa Lucía, así como otros menores, están documentados como parte del eje neovolcánico, tal que pertenece la llamada Sierra de Amealco, que alcanza hasta el cerro del Cimatario en Querétaro convertido en parque nacional, y que es pasto de las envidias de los desarrolladores que quieren quedarse con esas tierras para llenar sus bolsillos de dinero producto de la especulación.
Este mal empieza a producirse en San Juan del Río, el Cerro de la Venta está rodeado de viviendas, luego de que en el 2019, un diez de mayo se incendiara de manera verdaderamente preocupante, y tras cinco incursiones de ambientalistas con reforestaciones, tanto de la sociedad civil como de Causa Ambiental de Alma Candelas y Gigantes Verdes de Marco Ávalos, nadie más le pone interés a este cerro.
La preocupación es que ahora ya es pasto de los Reisers, de las bicicletas de todos los tipos y tamaños, y han empezado a hacer rampas construidas con los propios materiales de la zona, pero no se ve que de donde movieron las piedras o los materiales principalmente tezontle rojo, se hayan plantado uno o dos o diez o 100 árboles…
Los reisers son esas unidades motoras que son todo terreno, que gustan de los retos de subir montañas meterse a bordos o presas para probar su potencial, sin importar si derriban plantas o si pisan a algunas especies de animales menores, el reto para ellos es probar que sus unidades son potentes y que suben por donde sea… esto ya provocó que los sacaran de zonas como el cañón del paraíso, del mirador de cuatro palos y otros lugares de la sierra queretana… entonces hay que sacarlos de Amealco y de San Juan del Río… que se busque la manera de mantenerlos pero no de que destruyan la naturaleza…
Y no sólo esos automotores se ven por ahí, ya por las mañanas muy temprano camionetas equipadas ya están hasta las cruces y en ellas hay gente que no tiene buen aspecto… sobre todo porque están bebiendo y no precisamente agua… al Cerro de la Venta lo visitan familias y muchas mujeres que hacen su ejercicio, y se ponen en peligro… de esto nada ha dicho la autoridad… es denuncia…