Escribe:-Conde Nando
*** La fama es la necesidad de ocultamiento.
*** Ya que no tuve niñez, déjenme tener curriculum
*** No se puede entender ningún movimiento importante sin la presencia constante de las mujeres
*** Cuan fácil es mantener la virtud si nadie nos asedia como es debido.
Mencionaba Marta Lamas, su amiga, que Carlos decía las cosas justas en el momento adecuado, por lo que a diez años de su partida siempre nos preguntamos que hubiera opinado sobre la violencia que inunda nuestro país, el arribo de López Obrador a la silla presidencial, del encierro pandémico en una cuarentena que ya se desbordó, de Gatell como oráculo de la salud. Ensayista, cuentista ( “ Manual para indios remisos “ ), cunéfilo, coleccionista ( allí está su Museo del Estanquillo “ para constatar una pequeña parte de su colección que abarca 40 años coleccionando fotos, grabados, cerámica, libros, miniaturas en maqueta, películas, libros, revistas et al con cerca de 30,000 objetos que se inició con un dibujo de Covarrubias ), defensor de causas perdidas, por lo que obtuvo un doctorado, como su lucha contra la homofobia y el sida, también defendió los derechos de las mujeres e indígenas y la despenalización del aborto, orador, conferencista, creador de instituciones, personaje de historieta ( “ La familia Burrón “, “ Los supermachos “ y “ Chanoc “ dónde aparece concursando en el premio de los 64, 000 pesos ), aforista, actor ( Los Caifanes, Un mundo raro, Lola la trailera ), opinador político ( Por mi madre, bohemios ), crítico de cine, cronista y el único intelectual que todos reconocían en la calle, ailurófilo ( amante de los felinos ) cuyos gatos tenían nombres como Miau Tse Tung, La gata Christie, Mito Genial, Fray Gatolomé de las Bardas, Ansia de militancia y otros ocho más que se adueñaban de su espacio. Según la misma Marta Lamas le gustaba el chisme y se declaraba misógino-feminista, odiaba la injusticia y ponía apodos a todos sus amigos. Premio Anagrama de Ensayo. Murió un 19 de junio por fibrosis y fue homenajeado en el Palacio de Bellas Artes. Sus libros más conocidos: Amor perdido, A ustedes les consta, Escenas de pudor y liviandad, Apocalipstick. Aires de familia, El estado laico y sus malquerientes. Hoy hay que leerle más que nunca ya que su palabra sigue vigente y se extraña su laberinto de palabras y su humor negro y corrosivo. Invitado frecuente a la televisión y entrevistado para hablar de cualquier tema, eterno vecino de la colonia Portales dónde vivía con una tía, aunque tenía un depa en la Zona Rosa, al que llamaba “ mi leonera “, comprador compulsivo de chácharas en la Lagunilla, amigo de María Félix y otras celebridades. Su imagen icónica siempre estará presente en nuestro país. Mardonio Carballo: ¿ que diría hoy con su palabra aguda y sarcástica ? No tenía miedo de cruzar los límites entre la alta cultura y la cultura popular. José Emilio Pacheco: Monsiváis es el último polígrafo que puede escribir y hablar de todo. Mary Càrmen Sánchez: desmontaba los mecanismos y artilugios que el estado usaba para privilegiar a las élites “