Tequisquiapan, Qro.–Hace 30 años La Asamblea General de las Naciones Unidas, adoptó la Convención sobre los Derechos de las Niñas y Niños, este acuerdo internacional por la infancia signó un precedente histórico para que nuestros niños y niñas tengan acceso a un sano desarrollo y crezcan en un ambiente de paz, dignidad, tolerancia, libertad, igualdad y solidaridad.
Retomando estos mismos valores y la importancia de preservar una vida libre de violencia, es que la diputada Martha Daniela Salgado, en conjunto con el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN), presentó ante Oficialía de Partes, una iniciativa de ley en la cual propone que la prohibición del castigo corporal, acompañado del concepto de humillante en las leyes y códigos, que tiene como garantía para que las autoridades competentes puedan intervenir a través de medidas alternativas y multidisciplinarias, incluyendo medidas educativas, psicológicas y de trabajo social, entre otras, que acompañen a madres, padres y cuidadores de niñas, niños y adolescentes a desarrollar y practicar medidas alternativas de crianza desde un enfoque de derechos y basadas en el respeto.
Mencionó Salgado Márquez, también presidenta de la Comisión de Desarrollo Social, Grupos Vulnerables y Vivienda mencionó que los efectos nocivos del castigo humillante en el desarrollo y vida de niñas, niños y adolescentes, se manifiestan de diferentes maneras, tales como daños físicos directos o indirectos, dolores de cabeza estómago, colitis, incontinencia urinaria, problemas de sueño, problemas de atención y retención, alteraciones de memoria, afectación en sus posibilidades de desempeño escolar, hiperactividad, miedo, hostilidad, agresividad, ansiedad, angustia, retraimiento, trastornos depresivos, estrés post-traumático, aumento de la aceptación del uso de la violencia en las relaciones con sus pares, baja autoestima, agresividad, ausentismos, falta de interés, alcoholismo, consumo de drogas, daño auto infligido y tendencias suicidas.
“Son situaciones delicadas y debemos ir a la prevención, el castigo corporal es un fenómeno generalizado en América Latina y tiene un impacto directo en los ámbitos físico, médico, psicológico y emocional de los menores de 18 años (…) No es necesario llegar a la parte física, no es necesario llegar a utilizar ese recurso, cada familia funciona de manera diferente, si yo como adulto sólo te puedo controlar con un manazo o con una nalgada, lo que te estoy dejando ver es que eso funciona y que está permitido, el problema es que todo puede comenzar a desarrollarse a partir de una nalgada y terminar en algo realmente lamentable”. Comentó la legisladora.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda , en Querétaro habitan 545,065 niños y niñas de cero a 14 años, los cuales representan 30% de la población, y de este alrededor del 60% sufre violencia, con 15% en situaciones bastante severas de violencia, no solamente física.
Para prevenir la violencia contra las niñas y los niños se deben tomar medidas, crear políticas, promulgar y aplicar de forma fiable leyes y aplicarlas para promover formas positivas de disciplina y proteger a los niños y niñas contra los abusos y la violencia dentro de sus familias.