El ingreso laboral per cápita real mostró una disminución anual de 2.5% entre el cuarto trimestre de 2016 y el cuarto trimestre de 2017, al pasar de $1,711.62 a $1,669.31, se reporta en la publicación trimestral de las variables relacionadas con el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP), del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).
De igual forma, CONEVAL observa una disminución de 1.4% durante el cuarto trimestre de 2017. El ingreso laboral per cápita real en el cuarto trimestre de 2017 es mayor que en el cuarto trimestre de 2014, pero menor que en el mismo periodo de 2007.
Como consecuencia, la población con un ingreso laboral inferior a la línea de bienestar mínimo aumentó de 40.0% a 41.0% entre el cuarto trimestre de 2016 y el mismo periodo de 2017.
Este aumento revirtió las disminuciones observadas durante 2016, que habían sido resultado de una baja inflación, para posicionar el indicador en un nivel similar al observado en el segundo trimestre de 2016.
CONEVAL explica que el aumento en la población con un ingreso laboral inferior a la línea de bienestar mínimo radica principalmente en un aumento del valor de la canasta alimentaria de 9.0% en zona urbanas y 8.7% en zonas rurales en este periodo; así como por una disminución en el ingreso laboral real de 2.5% anual en este periodo.
No obstante, durante el cuarto trimestre de 2017, se redujo el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior al costo de la canasta alimentaria, de 41.8 a 41.0 por ciento, derivado de un incremento en el número de ocupados en los estratos socioeconómicos de menores ingresos.
Asimismo, en este periodo se observó un aumento en el número de trabajadores formales registrados en el IMSS, a la par de una caída en la tasa de informalidad laboral de 0.2 puntos porcentuales.
Así, entre el cuarto trimestre de 2016 y el cuarto trimestre de 2017, el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP) presentó un incremento de 2.7%, y pasó de 1.0294 a 1.057.
El aumento del ITLP fue causado por un incremento en los precios. Dicho aumento se refleja en la dinámica del valor de la línea de bienestar mínimo, en la disminución del poder adquisitivo del ingreso laboral y en el aumento del porcentaje de la población con ingreso laboral inferior a la línea de bienestar mínimo.
En contraste, se reportó una disminución trimestral de 1.8% en el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza, al pasar de 1.0767 a 1.0570 entre el tercer y el cuarto trimestre de 2017.
Esta tendencia se observa tanto en zonas rurales como urbanas; no obstante, el aumento anual del Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza es más pronunciado en las zonas urbanas y la caída trimestral es más pronunciada en las zonas rurales.
En el ámbito urbano, Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza presentó una tasa de crecimiento de 3.1% anual y una disminución de 1.4% trimestral. En tanto en zonas rurales, el ITLP presentó una tasa de crecimiento de 1.8% anual y una disminución de 2.4% trimestral.
Entre el cuarto trimestre de 2016 y el cuarto trimestre de 2017, en 20 de las 32 entidades federativas, aumentó el porcentaje de población que no puede adquirir la canasta alimentaria con su ingreso laboral. Destacan los estados de Hidalgo, Ciudad de México y Tabasco, con incrementos de 8.6, 6.8 y 5.9 puntos porcentuales entre el cuarto trimestre de 2016 y el cuarto trimestre de 2017, respectivamente.
En contraste, en el mismo periodo los estados de San Luis Potosí, Zacatecas y Michoacán reportaron una disminución del porcentaje de 6.2, 3.1 y 3.0 puntos porcentuales, respectivamente.
Con la publicación trimestral de las variables relacionadas con el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP), el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) genera información para observar la evolución del poder adquisitivo del ingreso laboral de los hogares y, con base en éste, analizar si aumenta o disminuye el porcentaje de la población cuyos ingresos laborales son insuficientes para adquirir la canasta alimentaria.
Para calcular el ITLP, el CONEVAL utiliza, desde el 2010, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), que realiza el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Si el ingreso laboral aumenta más que el valor de la canasta alimentaria, el poder adquisitivo del hogar mejora y el ITLP tiende a bajar. De forma inversa, si el precio de los alimentos de la canasta alimentaria aumenta más que el ingreso laboral, el poder adquisitivo disminuye, por lo que el ITLP tiende a subir.
Ni el ITLP ni el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior a la línea de bienestar mínimo constituyen mediciones de pobreza, toda vez que no incluyen todas las dimensiones y conceptos que señala la Ley General de Desarrollo Social. Sin embargo, estas dos variables sirven como señal preventiva de corto plazo sobre el ingreso laboral de las familias y su relación con la evolución del valor de la canasta alimentaria, es decir, sobre el poder adquisitivo del ingreso laboral de los hogares, finaliza CONEVAL.