El peso mexicano se depreció notablemente la tarde del domingo, alcanzando niveles no vistos desde finales de 2022, debido a un entorno adverso para los activos de riesgo y crecientes temores de una posible recesión en Estados Unidos.
Durante las operaciones en el mercado internacional, la moneda se cotizaba a 19.4120 por dólar, con una caída del 1.30% respecto al precio de referencia de Reuters del viernes. En su punto más bajo, el peso llegó a debilitarse hasta 19.5580 unidades, el nivel más bajo desde diciembre de 2022.
Este descenso se enmarca en una tercera jornada consecutiva de pérdidas para el peso, tras conocerse el jueves que la actividad manufacturera en Estados Unidos había caído a su nivel más bajo en ocho meses. Además, el débil reporte del mercado laboral publicado el viernes amplificó las malas perspectivas.
México, siendo altamente dependiente de la economía de Estados Unidos, su principal socio comercial y destino de más del 80% de sus exportaciones, se ve especialmente afectado por estos cambios. La moneda mexicana, que históricamente ha sido una de las más estables frente al dólar, ha enfrentado una presión significativa desde las elecciones locales del 2 de junio, cuando la contundente victoria del oficialismo despertó preocupaciones sobre una posible reforma al sistema de justicia, lo que ha generado inquietudes sobre el ambiente de negocios en el país.