Alrededor del 30% de los comerciantes afiliados a la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (CANACOPE) no están de acuerdo y se resisten a la tecnología e incorporación de herramientas modernas que simplifiquen los procesos productivos y administrativos, lo cual los arriesga a desaparecer en el futuro.
Según datos proporcionados por Sergio Martínez de León, presidente de Canacope en la entidad,son cerca de 10 mil pequeños comerciantes básicamente en esquema de empresa familiar, no han digitalizado sus procesos y trabajan de manera empírica, lo cual impide que se cuente con datos y herramientas certeras para conocer la situación financiera del negocio.
En este sentido, reconoció que durante este período de pandemia hubo también varios comercios que se vieron obligados a migrar a la digitalización y diversificar las formas de venta, ante las restricciones impuestas en su operación como parte de las medidas sanitarias implementadas para disminuir contagios.
“Son principalmente empresas familiares, personas que están en estas reservas y resistencias con el tema tecnológico y son los que preocupan bastante, están con esta resistencia de no migrar a procesos digitales, el tema de la venta, de los softwares que se ofrecen para eficientar los procesos y esos comercios penden de un hilo; en cualquier momento que haya algo extraordinario como ahora la pandemia , con algún repunte, van a terminar desapareciendo”.