Escribe.- Mimi Laja
Te acercas… salado, carnoso, viril:
Quito toda duda loca duda entre mis manos suaves, Besas mis cabellos…
Nuestras carnes vírgenes del labio ajeno,
Me entrego a ti cruelmente
A los mares de tu piel extensa
Húmeda como la noche.
El vino de mi lengua corre por la tuya, Te sueño, te estoy viendo
Labios calientes, dolientes, pérfidos, Perfectamente dolorosos.
Me hincas ante ti… Saliva tenue, Húmeda cual lluvia.
Tus manos recorren mi cuerpo, Estrujas tus pecados
En la pila de mis aguas,
Tómame, luego dame un paño seco.
Gotas recorren;
Muerdes, agita, tropieza, absorbes.
¡Mójame, que deseo escurrirme entre tus sábanas! Compartamos el olor, saciemos el paladar
De los miembros exquisitos,
Que la danza sea explosión y locura,
Líquidos corriendo a la fuente de la vida.
Húmedos como el alba… Brotan gotas, el festín De la tierra seca.
Hombre, macho, semental,
Te monté, me trepaste,
Me empalaste como el eucalipto Me asfixiaste
Eran solo los vapores
De tus deseos sobre los míos.