El gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, afirmó que las acusaciones en su contra tienen una intención partidista que no obedece a una cuestión legal, sino política, y ratificó que no tiene nada de qué avergonzarse, ni nada que ocultar.
“Doy la cara y defenderé mi nombre. Seguiré trabajando sin pausas, sin distracciones, enfocado en dar resultados a las y los queretanos”, señaló durante la conferencia de prensa del presidente, Andrés Manuel López Obrador, efectuada en la 17ª Zona Militar, en la capital de Querétaro.
El mandatario estatal sostuvo que no se puede creer en la palabra de un delincuente confeso y puntualizó que, como siempre, está dispuesto a dar la cara ante la ciudadanía y ante las autoridades; “siempre lo he hecho y hoy no será la excepción”, dijo.
Ante el presidente de la República e integrantes del gabinete federal y del estado, apuntó enfático que no busca la protección a cambio de inventar falsedades.
“El señor Emilio Lozoya ha pretendido involucrarme,
con una bajeza inaudita, en actos de corrupción. Ha aportado solo sus dichos, que valen lo que su prestigio: nada. Sus dichos son una infamia por varias razones”, explicó.
Externó que “desde que fui diputado federal, apoyé la reforma energética de 2008, entonces propuesta por el PAN. La seguí apoyando como Senador de la República y, de hecho, la presenté en nombre de mi partido”.
Domínguez Servién manifestó su convicción de que la reforma era benéfica para el país y expuso que como legislador su trabajo fue dar al país el mejor marco legal, pero no su implementación y menos su operación.
“No había necesidad de darme dinero para obtener un voto
que ya se tenía por convicción. Además, lo reitero: afortunadamente, yo no vivo de la política”.
El gobernador agregó que, si fuera cierta la calumnia, no habría presentado 807 reservas y modificaciones a la reforma
del gobierno, no le habría quitado el control del Consejo de Administración de PEMEX, ni quitado cinco asientos al sindicato petrolero.
Destacó, incluso, que sacar al sindicato no solo incomodó al gobierno, sino que detonó amenazas contra su vida.
“Si fuera cierta la calumnia, no habría propuesto la creación de un fondo petrolero, con recursos etiquetados, para asegurar la transparencia y evitar el saqueo que después se dio”, añadió.
Domínguez Servién dijo que con las calumnias se ataca a un gobernador de oposición bien calificado.
“Mienten porque Querétaro no tiene una sola observación de la Auditoría Superior de la Federación, ni de la Secretaría de la Función Pública Federal. Tenemos prácticamente deuda cero”, sostuvo.
Resaltó que en Querétaro hay empleo y buenos salarios y el estado es ejemplo de crecimiento, de calidad y de grandeza.
“Somos gente de trabajo, de esfuerzo y de palabra; además, el año próximo habrá una elección; por eso nos atacan”, puntualizó.
Durante la conferencia, el gobernador Domínguez Servién manifestó al presidente López Obrador su respeto y su gratitud por la atención que ha dado en todo momento a las necesidades de las y los queretanos.