Por: Mariana Canseco
Al comprender que los menores con padres en centros penitenciarios son vulnerables a caer en conductas nocivas, el alcalde Luis Bernardo Nava Guerrero trabaja en diversas estrategias con el objetivo de que esos niños, niñas y adolescentes puedan mejorar su calidad de vida.
Esto a través de los resultados de la Estrategia de Intervención “Acompañante Resiliente”, la cual se realizó en conjunto con la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario de Querétaro (CESPQ).
El alcalde del municipio de Querétaro reiteró su compromiso por reducir los efectos que el encierro de una madre o un padre puede tener en el crecimiento y desarrollo de los hijos.
“En Querétaro nosotros queremos, que aunque sabemos que estas situaciones son ajenas a nosotros, prevenir que las niñas, niños y adolescentes puedan tener un mejor futuro con el apoyo que les podamos brindar», precisó Nava Guerrero.
De ahí que informó que después de un año de trabajos, se mantienen estrategias de trabajo con cinco niñas, cinco niños y dos adolescentes de una primera generación; en tanto ya se trabaja con un niño, dos niñas y dos adolescentes de una segunda generación que inició en febrero.
Y que en general se ha conseguido aumentar el nivel de autoestima, una mayor identificación de emociones, un mayor nivel de expresión de las necesidades personales, una mejora en los vínculos emocionales con sus cuidadores principales, mayor capacidad para el seguimiento de indicaciones, mejora en el control de impulsos, y una mejora en la regulación corporal; mientras que en la cuestión social y familiar, hay una identificación de vínculos y personas seguras como red de apoyo y mejor convivencia con sus madres.
