Por Raúl Rosillo Garfias
Los programas sociales, deben encaminarse a una pensión universal de todos los Mexicanos, y no están mal cuando estos se aplican de buena manera y no con fines electorales, o clientelares, afirman los empresarios, que señalan que el enfrentar a la población con la empresa, eso sí es un error, porque el dejar de pagar impuestos, el dejar de ser productivos para sostener inclusive a hacienda pública, eso sí lleva a la bancarrota al país entero y al gobierno en primer lugar.
Destacan los empresarios que ninguno de ellos está en contra de los programas sociales que se tienen y que de acuerdo con el INEGI el 60 por ciento de la población ya está inmerso en alguno de estos, ahora hay que fortalecer a la empresa pequeña mediana y grande y a la micro desde luego hay que alentarla para que de cada vez mejores resultados y tribute con oportunidad para que los programas alcancen a todos y no sólo a la parte que desean con verter en clientela electoral.
La intención de estos programas es muy buena, pero no deben servir para fomentar la flojera… muchos de estos han propiciado que hoy las empresas hayan perdido muchas manos, porque la gente dejó de apuntarse para trabajar y para ser productivos y todo porque en su hogar llegan dos y hasta tres de estos programas sociales y entonces se satisface lo mínimo indispensable y no hay necesidad de trabajar… y que pasará cuando la empresa ya no pueda pagar impuestos ¿por que se ha ahorcado?…
Ha llegado a tanto el cinismo de quienes gozan de estos programas sociales que, si se enrollan en alguna actividad de trabajo, quieren descansar los sábados y los domingos, desconociendo el rol de la empresa denominada fábrica, en donde no pueden parar las máquinas los fines de semana… Es urgente una cultura de la identidad del ser humano con el trabajo… de una identidad del obrero con su centro de trabajo… de un fortalecimiento de la imagen de calidad de vida que ha logrado el trabajador cuando es productivo… pero el uso de los programas sociales para satisfacer los egos de poder… han dado al traste con su función meramente social…