*** Con estructura activa ya en todo el Estado, Antorcha Campesina sigue adelante.
*** No es magia conseguir que les apoyen con programas, es necedad y defensa de derechos.
*** El trabajo social no tiene día, horario y por tanto los Antorchistas trabajan de lunes a domingo.
Por Raúl Rosillo Garfias.-
Las luchas de las organizaciones como Antorcha Campesina, son banderas no de los dirigentes, sino de la gente que sufre la falta de servicios elementales, en las zonas conurbadas también en comunidades alejadas, en donde no sólo hacen falta los servicios, sino inclusive el camino para mejorar la comunicación como un derecho humano, dice Jerónimo Gurrola Grave.
Explica que los políticos se atienden bien primero ellos y luego voltean a ver a los que menos tienen y es ahí en donde entran los defensores de los derechos de quienes menos tienen, de los más desprotegidos, y estas luchas no tienen horario, no tienen día y tampoco tienen colores, pero son banderas que ha enarbolado desde siempre Antorcha Campesina.
Los servicios para quienes menos tienen, agua, luz eléctrica, arreglo de calles y algunos otros como el drenaje, son siempre banderas de esta organización que está ya diseminada por todo el estado, y que siempre ha luchado de manera contundente por alcanzar el bienestar… pero no solo eso, también siembra conciencia en su membresía para que aprendan a luchar, para que defiendan sus derechos, y además enseñan cultura, arte y todo lo necesario para que la gente no sólo aspire a un mejor nivel de vida, sino también de estadio social.
El trabajo no es sencillo, dice Jerónimo Gurrola Grave, pero tampoco los resultados son producto ni de la magia, ni de la calentura del momento, es un trabajo constante, frecuente y sobre todo en ocasiones es hasta un poco necio, pero cuando hay resultados, la gente se suma a la chamba, y ayudan a sus gobernantes… termina diciendo, el dirigente estatal de esta organización.