Columna El Corregidor
Héctor Sinecio
Aqua vitam dat, sed etiam aqua mortis.
Se soltó el tigre morenista en la Legislatura del Estado de Querétaro; pero del estómago, y ni siquiera alcanzó a parecerse al de las Zucaritas, ya no diga del edredón comprado en la feria y que seguramente, con estos climas, usted tuvo que sacarlo de nuevo del clóset. Morena jugó contra Morena un interescuadras y ambos equipos perdieron, cuando ambos podían ganar y colgarse una medalla con la Presidente. Sus esfuerzos fueron pobres, nunca mencionaron, por cierto, baby diputado Homero Barrera, lo que en CONAGUA les dijeron sobre El Batán. Para otros, los que nunca ganan, sus fobias hacia Mauricio Kuri los cegaron, y sus argumentos francamente fueron de risa. El mandado se lo comieron otros que no son diputados y sí fueron a cabildear el 5 de Mayo. Pero ya el circo se acabó y algunos, en conciencia, deben saber quiénes se quitan el maquillaje de payaso, cuáles el leotardo de trapecista y otros el traje de domador. Morena no necesita más curules porque diputados son los que le faltan. Lo mismo aplica en lo federal; donde cada iniciativa de los morenistas en San Lázaro nos cuesta a los contribuyentes dos millones de pesos. Simplemente, no se vale.
No por nada su propia líder nacional de Morena, Luisa María Alcalde, en base a lo publicado por El Heraldo, los da por muertos en Querétaro. Solos, nomás no pueden. Pero no crean que son los únicos damnificados por El Batán. La fracción del PAN no pierde pero tampoco gana; al edil Chepe Guerrero, quien fue el primero en salir en defensa del proyecto hídrico, solo se le sumaron Gerardo Ángeles, Memo Vega y Mauricio Cárdenas. Toño Zapata, Juliana Quintanar, Verónica Castañón, no alzaron la voz, mientras a Enrique Correa, al parecer, no le soltaron el apellido. Batán da y Batán quita, el PAN gana y pierde. El PRI empata. Adriana Meza jugó su juego, su presidenta Abigail Arredondo fue ambigua. No tanta suerte tuvo MC. El diputado Tang sin “H” tenía todo para sacar una buena raja política, pero por lo visto en México ya dejó la novedad y se quedó en la banca. El Verde gana, se la llevó tranquila, no compraron pleitos ajenos y se subieron a la tendencia de Palacio Nacional. ¿Alguien sigue meciendo todavía esa cuna? ¿Eres tú, Astudillo? El PT aún podría, en tiempo extra, ganar, pero ya se sabe que siempre quedan mal con los acuerdos.
Además de las lluvias de las que sí mojan, llegaron a la par una lluvia de encuestas rumbo a la gubernatura, nomás usted dirá: Demoscopia, El Heraldo, Massive Caller, Rebrum y hasta una que otra en RRSS más pirata que las camisas del edil de Amealco, Óscar Pérez. Ya en el programa La Neta, con la politóloga Sory Vega y los abogados Lis Salas e Iván Fabela, comentamos varias, pero deje se las resumo, si me lo permite. Primeramente, la marca PAN adelanta en casi todas a Morena, por una ventaja que va de más de diez puntos al empate técnico. Seguidamente, en el PAN prácticamente se está cerrando entre Felifer Macías “Niño Gobernador” y el presidente municipal de la capital, junto a Luis Bernardo Nava, que atinadamente Mauricio Kuri colocó en la Secretaría de Desarrollo Estatal. Mismo que le copian los programas, pero en chafa, a nivel federal. Mientras que Agustín Dorantes nomás no crece ni con cápsulas de hígado de tiburón, esas que sabían regacho, pero toda mamá queretana que se preciara de ser responsable, obligaba a sus retoños a tomar. Tema aparte, Marco del Prete, impresionante su inercia ascendente.
Calmantes montes, alicantes pintos y pájaros cantando. Ahí vamos con los de guinda. Morena, como tal, pone en los primeros lugares a Santiago Nieto y Gilberto Herrera. Luis Humberto Fernández está en los sótanos. Los fundadores están lejos de cacarear suficiente el huevo. Sin embargo, ahí le va, nomás no lo comente. Como Cuarta T, se les cuela al mismo nivel que el exrector, el Verde Ricardo Astudillo, mismo que en el tracking ha sabido no solamente posicionarse y mantenerse en las métricas, sino que también ha crecido. Lo obvio se obvia por obviedad. Morena, sin PT y sin Partido Verde, no es competitivo. Ya lo vio, lo que les pasó en Durango y Veracruz. Mientras que el profe Anaya, del PT, no ha definido todavía si habrá alianza o si sacará candidato. Muchos dicen que ahí acabará Gilberto Herrera. El Verde sí brindó desde su dirigencia nacional todo el apoyo a su diputado federal. Al menos en Querétaro, en Morena les sobra la soberbia. Morena mismo fue quien derrotó —no el PAN— a sus tres últimos candidatos a la presidencia municipal de la capital. Cuando no están en guerra, preparan flechas, y eso no es un partido político.
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