*** Los caseríos de Amealco han ido desapareciendo paso a paso, no hay quien los pare.
*** Los techos de teja y a dos aguas, poco a poco se han ido cambiando por losas de cemento.
Por Raúl Rosillo Garfias
Una de las grandes preocupaciones de los amealcenses de cepa, de esos que tuvieron que caminar la legua para progresar y regresar a su tierra con algo de éxito, es como paso a paso de han ido perdiendo las características de caserío de esta ciudad, que ostenta el título de “Pueblo Mágico”… un caserío, que abarca toda una región de México, y que colinda con el Estado de México, con Guanajuato y con Michoacán… en donde las construcciones altas inclusive de dos pisos, con techos de teja larga a dos aguas, con tejamanil, morillos y tapancos, son sus características… han ido desapareciendo lamentablemente.
Con tristeza algunos observan como el paso del tiempo, la falta de mantenimiento preventivo en esas construcciones han ido permitiendo el paso de nuevas técnicas de construcción, haciendo de influencias y de relaciones, se han ido brincando las restricciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia, y han dejado desaparecer las características de este ahora Pueblo Mágico, que inclusive se ha visto asediado por inversionistas nacionales y extranjeros, en materia de casas de descanso y cabañas.
Una de las esquinas icónicas de Amealco, es en donde se ubicaba la cantina la Concordia de don Jesús Arias, que también fue el correo, cuando aún se utilizaban las cartas para comunicarse, lugar al que llegaban misivas de los Estados Unidos, pues Amealco desde antes del año 40 ya tenía expulsión a los Estados Unidos, con aquel programa de braceros controlado por el propio gobierno.
Cierto que los arquitectos de todos los tiempos están llamados a dejar huella en el mundo del diseño y de la construcción, pero también están comprometidos a conservar la identidad de los pueblos… en ello tienen mucha responsabilidad las autoridades primarias, municipales, estatales y al final las federales, pues los primeros respondientes siempre son los municipios, algunas acciones las tienen que respetar los Estados y cuando se llega a la Federación es para mantener la hegemonía y la historia viva de cada demarcación por eso el INAH debe estar presente…