La Rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Dra. Teresa García Gasca, participó en el Congreso Internacional: Por el Futuro en el Presente con la ponencia “ODS 4: Educación de Calidad. Una visión para la post-pandemia”, bajo la organización de más de veinte asociaciones juveniles de México, Perú y Colombia.
El congreso tiene como propósito tratar los diferentes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y la Máxima Casa de Estudios de la entidad cuenta con el programa Universidad Responsable y Comprometida con la Sociedad para sumarse a la Década de Acción para alcanzar los ODS.
Durante su exposición, la Dra. García Gasca explicó que el objetivo 4 de los ODS es garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
“En pocas palabras sonaría muy fácil, pero realmente es difícil, porque hablar de inclusión hoy en día nos hace ver, y con la pandemia lo vimos más, que hemos sido poco incluyentes, que no tenemos prácticas y políticas de inclusión efectivas que nos garantice el que todos tengamos las mismas oportunidades, lo mismo que sea equitativa y que tenga la calidad que necesitamos para desempeñar nuestros trabajos en la vida futura de la mejor forma”, señaló.
La Rectora precisó que hay cinco retos para alcanzar una educación de calidad tras la pandemia de COVID-19, que a su vez se relacionan con otros ODS: asumir una responsabilidad con el entorno; la brecha digital; la igualdad; la calidad educativa; y la generación y transferencia del conocimiento con responsabilidad social.
“Siempre nos enfocamos en este objetivo 4, pero lo vinculamos con todo lo demás, porque no está aislado, la educación jamás va a estar aislada. Si hay un objetivo de los 17 que se ligue con todos es el número 4, porque todo tienen que ver con nuestra capacidad de transformar y esa nace de una educación de calidad”, aseguró.
La universitaria exhortó, en estos momentos de pandemia, a no despersonalizar el proceso de enseñanza-aprendizaje; reafirmar valores como la empatía, la solidaridad, la humildad y el respeto por los demás y por el medio ambiente; incentivar la inteligencia emocional y ser resilientes; controlar y tratar la angustia y el miedo, contando con información confiable sobre los riesgos y el manejo de la COVID-19 y la responsabilidad con otros; y alcanzar un nuevo equilibrio, estando unidos y siendo corresponsables.