Escribe.- Areli Zamora
Cine. Se acerca el tan añorado por unos y temido por otros, “Maratón Guadalupe-Reyes” ese maratón de puras fiestas, en donde la comida y la bebida son los actores principales. Para los que no saben o no están muy familiarizados con este término, el maratón Guadalupe-Reyes, es el lapso de una fiesta a otra, la celebración de la virgen de Guadalupe el 12 de diciembre hasta el 6 de enero, día de los Reyes Magos.
Bueno, a esos veintiséis días de pura fiesta, comida y bebida se le denomina el maratón Guadalupe-Reyes, en el cual, se atraviesan 9 días de posadas, que comienzan el día 16 y terminan el mismo 24, en algunos lugares comienzan el 15 para terminar un día antes de Nochebuena, el 24 de diciembre con su Nochebuena y la Navidad al día siguiente y cómo dejar afuera el recibimiento de otro año, despidiendo el año el 31 de diciembre para recibir el nuevo en la madrugada del 1 de enero y cerrando el maratón con la rosca del día de reyes, acompañada de un chocolatito caliente el 6 de enero.
Hoy queridos lectores, hablaré de una película que está en cartelera, muy adecuada a la época y recomendable por si quieres pasar un rato ameno y reírte de las trivialidades que suelen pasar esos días de fiesta. El largometraje al que me refiero es una película mexicana protagonizada por…. Y estrenada en la pantalla grande hace apenas unos días. Me refiero a la cinta llamada precisamente igual que el maratón antes mencionado, “Guadalupe-Reyes”.
Un filme que refleja la vida de dos hombres cuarentones con vidas completamente diferentes, un “Godínez” personificado por Martín Altomaro (como Luis) un hombre de oficina matado por su trabajo y su matrimonio y el otro, Juan Pablo Medina (como Hugo) un Mi rey que se la pasa en fiestas, súper popular en las redes sociales, de mucho dinero, pero por dentro completamente solo, insatisfecho y con una negación a envejecer. La historia es que ambos personajes fueron compañeros de escuela hace un buen de años, y dejaron inconclusa una promesa, hacer el Guadalupe-Reyes.
Tras la infidelidad de Jimena, la esposa de Luis, éste último acepta a cumplir el reto, tomar alcohol por los veintiséis días seguidos. Para lograr su objetivo ambos amigos se preparan, tanto de manera legal con un notario para hacer un reglamento de aquella misión, como de manera médica, es decir, saber qué hacer y qué tomarse para aguantar y llegar a la meta hasta el 6 de enero.
Te imaginarás todas las cosas que pasan en estos más de veinte días de alcohol y fiestas…. no te preocupes o ilusiones, no hay nada de sexo, solo una escena, pero es más graciosa que otra cosa. Más que nada, esta película refleja todas las ridiculeces que pasan en esas fechas y las realidades que ocurren tanto en una pastorela, en la cena de navidad con la familia como en las posadas que antes eran legendarias por su ambiente tan peculiar, mismas que se vuelven una fiesta infantil con los hijos de tus amigos, que ahora son más hogareños que fiesteros. Pero bueno…es el proceso de la vida.
Como te decía, es una película muy adecuada para las fechas, ya que estamos a días de empezar todas las fiestas decembrinas y terminarlas yo diría que no hasta el 6 de enero, sino, hasta el 2 de febrero con el día de la candelaria y sus famosos tamales.
¡Ay…! mi México lindo y querido, con sus tradiciones y maratones que sin duda hay que seguir y preservar. Señores pues buen provecho, salud y feliz maratón Guadalupe- Reyes.
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