*** Siete municipios siguen teniendo altos índices de pobreza en Querétaro, todos por arriba del 50 por ciento.
*** Los programas sociales, se han convertido en paliativos, pero si ayudan a mitigar las carencias.
*** Los gobiernos municipales, obligados a estar más cerca de la gente y a destacar el servicio como prioridad.
Por Raúl Rosillo Garfias
Tema siempre álgido, es sin duda el índice de pobreza y de desarrollo de los municipios, como entes más visibles dentro de la estructura del Estado Mexicano, precisamente en donde se da presencia y esencia del trabajo de gestión de desarrollo de políticas públicas para impulsar el crecimiento de oportunidades para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, responsabilidad que recae en los gobiernos municipales, que plasman sus objetivos en el afamado Plan Municipal de Desarrollo, y en donde el Comité Para el Desarrollo Municipal, es el vigilante y rector.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, el CONEVAL, en Querétaro de los 18 municipios que componen esta geografía de la entidad, hay siete municipios que tienen grados de pobreza significativos, y en donde se reclama atención especial y programática de parte de los gobiernos federal y estatal.
El asunto es que los munícipes, aun siendo del partido en el gobierno, no se sienten atraídos por la Federación, porque conocen la historia de los seis años anteriores, en donde los 2654 municipios del país estuvieron a la deriva y abandonados, sin recibir apoyos de la federación… Otros se conforman con la participación del ejército y la guardia nacional en los operativos para disuadir la presencia de criminales y malosos, pero eso no ayuda al progreso ni mucho menos al desarrollo.
Así el CONEVAL, califica como el municipio más pobre de la entidad a Pinal de Amoles, que además es el segundo geográficamente hablando más grande, con un 72 por ciento de su población en situación de pobreza, le sigue Tolimán con un 61.6 por ciento, Landa de Matamoros con 59.4 por ciento, Peñamiller, 56.5 por ciento, Amealco de Bonfil que se despega del segundo lugar como más pobre y baja varios puntos para colocarse con el 56.2 por ciento para irse al quinto lugar, el sexto es para Ezequiel Montes con un 53 por ciento cerrado y Cadereyta de Montes el municipio grande del Estado y también del país, con un 52.2 por ciento.
Que ha hecho que las tablas de pobreza les den algunas ventajas a los municipios, como Amealco, y Cadereyta, el tener nombramientos como Pueblos Mágicos, y el esfuerzo de sus gobiernos locales por colocarlos en el mapa nacional como destinos para el paseo y la diversión, potencializando su riqueza natural y su gastronomía alguna de ella prehispánica.
Estos siete municipios, se ubican en la Sierra Gorda, y en el Semidesierto de Querétaro, son sin duda entes geográficos que tienen retos más que significativos para alcanzar su desarrollo, pero tienen grandes ventajas, su gente es altamente tradicionalista y sobre todo tiene alto sentido de pertenencia por sus lugares de origen.
El gobierno estatal ha implementado trabajos muy focalizados para combatir la pobreza en estos municipios, con programas sociales como el alimenticio, las tecnologías como alternativa, la inversión en infraestructura básica, como agua potable, drenaje y la electrificación, llegando a comunidades marginadas; se fomenta la capacitación y el empleo, se promueve el apoyo a micro y pequeñas empresas, para fortalecer el empleo local y desde luego mejorar la derrama económica de la zona.