Escribe Miguel Hernández Durán.-
“Podemos” gastaron ríos de tinta y toneladas de papel o mucho espacio en medios digitales para explicar el meollo de este conflicto que amaga con escalar el nivel de violencia por la falta de voluntad, que es lo que se necesita, para tratar de resolver de una vez y por todas, este problema.
No es cosa menor y el conflicto no tiene solución de un día para otro, no es muy complejo y se requiere de voluntades tripartitas; del gobierno, de los concesionarios además de los de plataforma digital.
Vamos por partes y busquemos lo que es justo y equitativo, además de que el origen radica en que los taxistas amarillos en su inmensa mayoría son solamente trabajadores, no son dueños de la concesión. Deben someterse a un incansable programa de requisitos, desde el famoso Tío (Tarjetón de Identificación Oficial) pagarlo, pasar los exámenes, pagar el refrendo dos veces al año, licencia tipo B, antidoping, impuestos y demás. Sin mención de lo que padecen en cuanto a robos y asaltos que además ha dejado varios muertos en la ciudad capital y en otros municipios.
Ellos, los trabajadores del volante son los que realmente enfrentan y tienen que cumplir con todo lo antes mencionado, ah y además con la religiosa cuenta que llegó a ser hasta de 500 pesos al día, hoy oscila entre 300 y 350 pesos porque la demanda de taxi tradicional ha bajado, dicen, hasta en un 70 por ciento, por lo que los dueños de las concesiones le han tenido que bajar a la tarifa de la cuenta, ya que además hoy en día lo que más escasea son justamente choferes pues muchos de ellos, al ver la oportunidad de tener una unidad nueva y un celular, pues simplemente emigraron.
Eso no se dice, que una gran mayoría de quienes eran solamente trabajadores, decidieron comprar un auto y sumarse a Uber, Didi CabyFIVE, Indriver, Un Taxi y una veintena más de plataformas que operan sin regla y control más que lo que solicita la plataforma, que en comparación con los amarillos tradicionales pues simplemente no hay igualdad o equidad.
En Uber que es el que más cobra de comisión le dejan un 30 por ciento y en las demás un porcentaje no mayor del 10%, entre esas plataformas está un taxi, plataforma queretana que solicita el 10 por ciento y además ofrece IMSS e INFONAVIT pero casi no es conocida, ahora el gobierno se sacó de la chistera la plataforma Taxi confiable, que de confiable no tiene nada, ya que es el mencionado taxímetro, pero que opera como plataforma digital y de muy mala calidad, sin que haya interés de los amarillos por ponerla a funcionar, ya que sigue imperando la negociación tradicional entre lo que pide el conductor y lo que ofrece el usuario.
Otro de los puntos y origen del conflicto que se vivió en la central camionera y que casi nadie menciona es que, hay dueños de 100, 200 y hasta 300 concesiones, entre ellos exgobernadores y políticos de la actualidad que se han adueñado de todo el sistema de servicio público de transporte en la ciudad de Querétaro y los principales municipios como San Juan del Río, Corregidora, y El Marqués.
Ellos han visto mermada sus ganancias hasta en un 70 por ciento y pues claro tampoco les conviene, independientemente de todas las diferencias que hay entre los amarillos tradicionales los requisitos que deben cubrir y cumplir, y lo que pagan por la concesión que hace unos años en el mercado negro se llegaron a cotizar hasta en ¡600 mil pesos!.
Sigue el problema al interior de MORENA y su militancia se pregunta ¿Hasta cuándo?, hasta cuando pues no se ve claro el panorama para destrabar, tanto a nivel nacional como local, que es lo que importa, lo que tiene que ver con la elección de la nueva dirigencia, aquí en reiteradas ocasiones lo hemos mencionado que los dos que únicamente tienen ciertas posibilidades de llegar es, por su trabajo y consistencia, Carmen Gómez Ortega, actual Consejera y ahora bajo la titularidad de la Secretaria de Cultura y Educación del Comité Directivo Estatal, e Israel Pérez exdelegado de BIENESTAR en el municipio de San Juan del Rio y cercano al delegado Gilberto Herrera Ruiz, Ángel Balderas Puga se sabe que también quiere, aunque lo niegue, pero no le alcanza el consenso y la aceptación de los 50 consejeros que habrán de elegir., y como pasa en todo familia los pleitos están a la orden del día, al parecer es la maldición de la izquierda, siempre traer o contar con los conflictos internos que muchas veces no los dejan avanzar. Pero bueno son autónomos y ellos deciden hasta dónde llegan o hasta donde estiran la liga, la cuestión es que el 2021 ya está a la vuelta de la esquina y las elecciones pueden cobrar facturas que no se esperaban..
Felipe y Margarita, volverán a comer con manteca, al parecer ya cumplieron con todos los requisitos para su nuevo partido, y bueno como se quedaron acostumbrados a vivir del erario y esa costumbre es difícil de superar. Todo indica que participarán en las elecciones del 2021 bajo una nueva franquicia, alejada, entre comillas, del PAN y que en un momento dado se convertirán en el partido bisagra de acción Nacional, si no al tiempo y así será.
Son coyotes de la misma loma y la ambición y adicción por el poder no se les quita, de otra forma no se explica uno como es que “El Comandante Borolas” pretenda la aceptación de los ciudadanos en los comicios del 2021…