Escribe:- Miguel Hernández Durán
De lo más nefasto que hay en el sindicalismo oficial y que al parecer tiene que ver con el robo millonario al sindicato del gobierno del estado es el señor Rafael Roa Guerrero, cuyo expediente es más que bochornoso con una carrera de corrupción, vicios y todo lo que tiene que ver con un mal empleado que ha traicionado a quien se le ha puesto encima. Hoy pretende curarse en salud y pretende inventar que el robo de casi siete millones quedará impune. ¿Será que la sociedad queretana es tan estúpida, tan inocente, tan ingenua que le puede creer a su indecente versión?
Resulta que el día del robo casualmente el grupo de policías estatales que cuidan la nómina desaparecieron como por arte de magia. El grupo de POES no estaba, nunca se apareció y eso que en esa fecha se sabía que en ese sindicato había casi siete millones de pesos. ¿Qué casualidad?…
Otro dato que indica su posible participación es que el corrupto de Rafael Roa tiene un gran amigo, compadre y compañero de parrandas que casualmente trabaja en la policía estatal, se llama Julio César Becerra está en activo y sospechosamente también cuidaba de la nómina. Pero ahora que había varios millones se hizo ojo de hormiga.
Nada en un robo de tal magnitud es casual, hay varios elementos que permiten señalar la complicidad de alguien de adentro que sabía y conocía el día en que se entregaban las pensiones. Por el bien de la sociedad este tipo de robos no deben quedar impunes. Es muy vergonzosa la actitud de ese borrachín de Rafael Roa y ahora que se avecinan las elecciones en ese sindicato, pretende imponer a toda costa a uno de sus incondicionales que encabeza la planilla roja…
Estaremos muy pendientes del acontecimiento porque no es posible que con la mano en la cintura este «dirigente» se quiera aprovechar de la inocencia de las autoridades y robarse así como así siete millones de pesos. El mal ejemplo cunde y el horno no está para PAN. A poco no…
De los funcionarios que andan con la agenda muy apretada y es que le toco llegar a mitad del camino es el Secretario del Trabajo Mario Ramírez Retolaza, quien ha implementado toda una serie de estrategias para equilibrar el número de expedientes que hay en las diferentes juntas de conciliación y arbitraje, además de que al parecer lleva muy buenas relaciones con la mayoría de dirigentes del sindicalismo serio del estado de Querétaro en las personas de Cruz Araujo y Alejandro Olvera.
Prueba de ello es que en el viernes pasado en una reunión con todos los integrantes de la Alianza Sindical del Estado de Querétaro (ASTEQ) se llevó a cabo una junta en donde quedaron de acuerdo en reanudar las mesas de trabajo que se habían mantenido con la mayoría de los sindicatos y que tantos resultados habían dado, respecto a las necesidades y peticiones de los trabajadores principalmente del área de la salud.
Hay optimismo en la ASTEQ por la reanudación de las mesas de trabajo, y es que la verdad al parecer aquí se consigue más cosas que en los desfiles donde solamente la queja y los gritos no llegan a buen término.
Inicia un nuevo reto y con el espíritu de avanzar seguramente con el secretario Mario Ramírez Retolaza encontrarán eco las peticiones de los miles de sindicalizados agrupados en esta central. Esto sin duda abona a la paz laboral que ha caracterizado al estado de Querétaro desde hace más de tres décadas, en donde curiosamente no se han tenido huelgas y en ello la Secretaria del Trabajo tiene mucho que ver,…
La Pluma de Conín
