*** Los transportistas sí quieren regulaciones y seguridad, los choferes son los rebeldes.
Por Raúl Rosillo Garfias
Los choferes de tráileres, en estos tiempos, se han convertido en hombres que con arrogancia solicitan trabajo, que con prepotencia se creen los dueños de las carreteras, que con coraje desatienden las reglas que tiene el circular por las carreteras del México, y esto ha venido a afectar a las empresas transportistas del país, dicen los propios empresarios del ramo.
No es fácil dedicarse a esta actividad hoy en día dicen, los choferes llegan a solicitar empleo, tratando de poner condiciones a los empresarios, no quieren vehículos gobernados, quieren más tiempo para llegar a descargar a sus destinos, pretenden tiempos muertos muy largos en sus jornadas.
Duran quince días a un mes tratando de portarse bien, pero luego de eso se vuelven improductivos y difíciles, sobre todo los que tienen de 40 años a menos, son los más problemáticos, eso es lo que ha terminado con la hermandad que había en las carreteras dice nuestro entrevistado, que prefiere el anonimato.
Explica que a ese espíritu de cooperación se ha tenido que ir alejando de las carreteras por la inseguridad, por la falta de vigilancia de las autoridades, por la poca o nula seriedad que el gobierno federal le da a la importancia de las vías terrestres, en tiempos tan complicados y difíciles como los que se viven.
Aún hay visos de que esto se componga… los transportistas están dispuestos a mandar a capacitarse a los choferes, pero estos con todo y eso no quieren poner en práctica los consejos y las enseñanzas que se les prodigan, quieren autonomías que van en contra de las políticas de la carretera de la empresa que contrata y del dueño de la unidad… en síntesis es un desorden y es urgente que haya regulación.
Explica el transportista que los dueños de unidades de tracto camiones y tráileres, están conscientes de que los camiones deben circular a 80 kilómetros por hora, que deben de ocupar los carriles de baja, y no los de alta como sucede ahora… y destacan que los chochos o los enervantes para no tener sueño existe y los toman los choferes, pero es imposible estarlos vigilando kilómetro a kilómetro, las autoridades carreteras deben ayudar y ser más rígidas.