Por Raúl Rosillo Garfias.-
Lo que definitivamente no debe suceder es que los funcionarios públicos, con el máximo cargo o con el mínimo, hagan mal uso de sus funciones, como en el caso de la regidora panista, por cierto, del municipio de Huimilpan… Beatriz “N”, que desde hace tiempo viene lesionando la economía, según el Diario de Querétaro y el Excélsior, periódico nacional, a más de 100 personas a las que les pidió desde 2,500 pesos hasta 37,000, y eso es lo que se ha denunciado. Ella pertenece a la comunidad de Lagunillas, en donde realizó todo este tipo de fraudes en perjuicio de sus vecinos, quienes la denunciaron, y ahora está detenida, según los datos aportados también por la Fiscalía General de Justicia de la entidad.
Las autoridades señalaron que se ejecutó una orden de aprehensión en contra de la funcionaria pública por su presunta responsabilidad en el uso indebido de documentos y fraude, delitos cometidos en perjuicio de varias personas de la delegación de Lagunillas. Tras su captura, la imputada fue presentada ante un juez para la audiencia inicial, donde hizo uso de su derecho a la duplicidad del plazo constitucional para determinar su situación jurídica, lo que pausó temporalmente el desarrollo de la audiencia. Mientras tanto, el juez dictó prisión preventiva como medida cautelar hasta la reanudación del proceso. La regidora Beatriz N., afiliada al Partido Acción Nacional (PAN), está acusada de haber utilizado documentos de forma indebida y falsificado firmas para gestionar créditos que ascienden a más de 1.3 millones de pesos. Los mayores detalles del caso los aporta el periódico Diario de Querétaro. Y bueno, ¿qué forma de estos funcionarios por hacer quedar mal a su partido político, que de por sí va a la baja en sus bonos y aún con estos comportamientos?
El término «Partido Político» parece que entrará en desuso y se estará utilizando algún otro término, como lo hace Movimiento Ciudadano, o bien el propio Movimiento de Regeneración Nacional. Los nuevos registros de organizaciones partidarias, sin duda, tendrán que ser creativos. Dice Guadalupe Acosta Naranjo, que inclusive, en adelante, estas organizaciones que están conformándose para ser el contrapeso del oficialismo tendrán menos ideología y más apertura a todas las corrientes de pensamiento. La pluralidad y la democracia, ante todo, deberán ser los ingredientes que les den vida a estas nuevas formas de búsqueda del poder. Y que el Frente Cívico, en donde él se mueve ahora, no es nombre para una organización política. Ese frente lo mantendrán para seguir sumando oposiciones al oficialismo.
