Por Raúl Rosillo Garfias
***El gobierno federal, con la Nueva Escuela Mexicana, parece haberse puesto las pilas y la Secretaría que dirige Mario Delgado, ahora está realmente interesada en la niñez y en su salud. Se cambiarán las reglas del recreo y de las cooperativas escolares, y de acuerdo con la publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF), las nuevas normativas son bastante estrictas. Tendrán 198 días para implementarse en todas las escuelas del país. La idea central es erradicar, de una vez por todas, los alimentos chatarra. Habrá que ver cuál será la respuesta de las grandes empresas, muchas de ellas subsidiarias de Morena, que participaron en el pasado proceso electoral, y no precisamente con poca inversión. Pero, en fin, esas son las indicaciones.
***Son ocho los puntos anunciados como cambios en el recreo, que durará media hora en la educación básica. Entre las modificaciones destacan: erradicar los productos ultraprocesados, ofrecer solo agua natural a los niños, asegurar que las cooperativas escolares funcionen adecuadamente, mejorar la comunicación entre maestros y padres de familia, reforzar la imagen de la Nueva Escuela Mexicana, capacitar a los docentes, ampliar la práctica del deporte, y dar seguimiento a cada niño y a la labor de las escuelas en general.
***El menú de prohibiciones es realmente desalentador, incluso para los padres de familia, quienes en ocasiones solo pueden permitirse lo que está prohibido debido a lo que ganan. Las prohibiciones incluyen: quesadillas, tacos, chilaquiles, tacos de canasta, dorados, gomitas, chocolates, frituras, gelatinas, botanas, pastelillos, chicles, cacahuates, donas, jugos, dulces, galletas, bebidas para deportistas, helados, cereales de caja, y muchos otros productos. El periodo de adaptación será de 180 días.
***Además, se aportan datos reveladores sobre lo que se consume en las cooperativas escolares, y los números dan miedo: en el 98% de las tienditas o cooperativas se venden alimentos chatarra; en el 95% de estas, bebidas azucaradas; en el 79% refrescos embotellados comerciales; y en el 77% de las escuelas, otros productos fuera de los planteles.
***El tema sigue siendo interesante y llama la atención, sobre todo porque la sentencia final es que los alimentos deben ser naturales, frescos y de temporada. Sin embargo, a pesar de las reseñas y las actividades de capacitación que se estarán dando a conocer en cada centro educativo, persisten los problemas. Habrá sanciones para las escuelas, los padres de familia y las cooperativas que no cumplan con las nuevas normativas.
Desde que yo era escolapio, se ha hablado de la nutrición en las escuelas. Quiero señalar que la educación pública es altamente formativa y democrática, pues conviven quienes tienen con quienes no tienen, y se forjan amistades que duran toda la vida. Las promesas de una mejor alimentación han estado presentes una y otra vez, y ahora hasta el Secretario de Educación publica sus requerimientos. Ojalá que estas acciones se lleven a cabo de manera efectiva y se logren resultados. Es necesario poner orden.