La Clínica de Atención Integral COVID-19 de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), incorporará dentro del procedimiento de exudado faríngeo para la detección del virus de SARS CoV-2, y la muestra de sangre para la identificación de anticuerpos, el servicio de rehabilitación con fisioterapia para personas que han padecido la enfermedad, así como la aplicación de un cuestionario de salud mental.
De acuerdo con la Dra. Teresa Garcia Gasca, rectora de la Máxima Casa de Estudios del estado, el servicio de fisioterapia será aplicado con el objetivo de que las personas que hayan cursado la enfermedad con sintomatología grave, eviten secuelas físicas; mientras que el cuestionario, es con la finalidad de que se tomen acciones respecto al tema.
De igual forma, la Rectora refirió que actualmente, en el protocolo, se tienen incorporada la evaluación nutricional del paciente, lo que permite relacionar su estado de nutrición con la reactividad de las personas, ya que se ha detectado una mayor sensibilidad a la infección cuando hay comorbilidades como la obesidad, hipertensión y diabetes.
Asimismo, informó que desde el inicio de la 4ta etapa de tamizaje de detección de SARS CoV-2 -que inició el 17 de agosto-, se han procesado 984 pruebas para la detección del virus, de las cuales 157 personas resultaron reactivas, es decir, un 15.96 por ciento; mientras que 926 muestras se han analizado con la prueba serológica, de las cuales 516 dieron positivo a la presencia de anticuerpos del patógeno, lo que se traduce en un 55.72 por ciento de positividad.
La Dra. Teresa García Gasca comentó que el porcentaje de reactividad, tanto al virus, como a la positividad de personas expuestas a este, es alto; sin embargo, consideró que son varios los factores que pueden incidir, entre ellos, la movilidad que ha aumentado en el estado debido a la reactivación económica.