*** Explican que los municipios como San Juan del Río, Tequisquiapan y Ezequiel Montes, apoyan.
*** Las dependencias como la SEA, CONAGUA y SEMARNAT, complican la obtención de permisos.
Por Raúl Rosillo Garfias
Los proyectos ambientalistas que pueden ayudar a construir mejor calidad de vida para los municipios, para el Estado y para el País, son apoyados bien por algunos municipios, pero otros definitivamente los pasan por alto, o no les importa el estado que guardan en sus localidades, y prefieren las planchas de cemento y los pavimentos antes que la vegetación y la plantación de árboles.
Los municipios con mayor apertura hasta antes del proceso electoral, eran sin duda San Juan del Rìo, Tequisquiapan y Ezequiel Montes, que ya tenían tratos muy avanzados y proyectos muy definidos en donde intervendrían los ambientalistas, en apoyo a algunos temas en específico pero que ya eran una parte importante del plan municipal de gobierno, señala José Luis Marruffo Villa uno de los estudiosos de estos temas.
Explica que las dependencias con mayor burocracia y tramitología, como queriendo decir que no les interesa lo que sucede son la SEMARNAT, la CEA y la Comisión Nacional del Agua, no sólo les dan largas, sino que los obligan a repetir una y otra y otra vez los trámites, tratando de que estos grupos de ambientalistas, que son conformados por gente que ama el medio ambiente y que está dispuesta a trabajar, se aburran y dejen de estar vigilando.
Todo tiene que ver con los permisos de cambio de uso de suelo, la vegetación que se removerá, y en donde se colocará, que están haciendo con los convenios que se tienen con las constructoras o con los desarrolladores, en donde los están aplicando, como lo están compensando, pues en algunos casos las superficies de uso común y que debieran ser entregadas a los municipios, las pagan en dinero, para especular aún más con los terrenos.
