Por Claudio Osornio
¿Arrancará en Querétaro la rebeldía en contra de Ricardo Anaya?
Esta semana el Gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez decidió ventilar públicamente su visión del “terremoto” que sacude al Partido Acción Nacional (PAN) por la candidatura a la Presidencia de la República. Y fiel a su estilo solicitó a sus correligionarios “no ahondar en la división del panismo” y en todo caso trabajar para lograr unidad al interior. Precisó que los medios de comunicación no son el mejor espacio para dirimir estos asuntos.
Sin embargo, al mismo tiempo Francisco Domínguez si aprovechó el viaje para confirmar lo que todo mundo sabe; el PAN está fracturado ante la salida de Margarita Zavala y no sólo eso sino que además endosó a la dirigencia de su partido, las renuncias que se han dado por la salida de la ex primera dama.Incluso el gobernador fue más allá y remató diciendo que la dirigencia del PAN se estaría “equivocando” al solicitar la salida de todos aquellos militantes que desde luego seguirán apoyando a Margarita Zavala. En pocas palabras Pancho Domínguez se “subió al ring” y nadie sabe cómo le pueda ir en su nueva aventura política.
Y es que hay que decir con todas sus letras que el Gobernador de Querétaro fue uno de los Gobernadores panistas que ofrecieron todo su apoyo a la esposa del ex presidente Felipe Calderón en sus aspiraciones presidenciales y una vez que ésta anunció su separación, la tarea más importante para Domínguez Servién parece ser que es iniciar la rebeldía ya profetizada por las huestes de Margarita Zavala. Solicitar a los panistas de Querétaro y del país, que no utilicen los medios para “acrecentar” la división de dicho organismo político, mientras él si los usa con esa finalidad, es una propuesta que rápidamente será desechada y enviada al baúl de los recuerdos. Sin embargo a esas alturas el daño estará hecho.
Es un secreto a voces que el Gobernador, para las elecciones del 2018 tiene objetivos electorales aún por cumplir, en algunos municipios del Estado y no se diga en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República. Desde luego la salida de Zavala es un boquete difícil de llenar, pero para eso de comenzar a remar “contra corriente” nadie mejor que Domínguez Servién. Sin duda alguna que por esa y muchas razones más Ricardo Anaya estará sumamente interesado en conocer
de primera, segunda y hasta tercera mano, cómo se va desenvolviendo la profetizada rebeldía en su estado natal, en donde a pesar de todos los movimientos telúricos en su contra, continuará contando con fieles escuderos.
En la lista podemos colocar, sin temor a equivocarnos a 4 alcaldes que en las últimas fechas, se han aferrado aún más a su dirigencia nacional. Marcos Aguilar en Querétaro, Guillermo Vega en San Juan del Río, Enrique León en Cadereyta y Rosendo Anaya en Amealco. Serán en éstos municipios en donde se volverá estratégico el manejo de los medios de comunicación, ya que es bien sabido que es justamente de éstos lugares en donde se podrían dar los mensajes más agresivos y doloroso para el virtual candidato de Acción Nacional a la Presidencia de la República.
Garantizar ésta mínima tarea será fundamental para los compromisos que se elaboren entre el virtual candidato y los alcaldes mencionados. A estas alturas del partido dejar visibles pequeñas grietas o de plano evidentes fracturas, sería un craso error. No deben perder de vista que el “medio motor” de fuerza que perdió el bólido azul -en todos éstos enjuagues- puede ser instalado a toda prisa en el bólido rojo y entonces la quiniela presidencial tendría un vuelco total. La moneda está en el aire.
Así las cosas, nos leemos en la próxima entrega…