Por Raúl Rosillo Garfias
Esta es una celebración de gran importancia para Querétaro y los queretanos creyentes de la Religión católica, pues saben que es la quinta semana de la cuaresma, que es el tiempo en que la Madre de Jesucristo, sufre por la pasión de su hijo, esta celebración religiosa que alcanza su éxito en el siglo XV, gracias al Papa Benedicto XIII, que le genera importancia universal en 1472, se disemina tan rápido que hay zonas en donde sigue siendo de gran relevancia, y Querétaro en América es uno de esos lugares.
De hecho es la fiesta grande de Soriano, en el municipio de Colón, en donde hay un santuario basílica menor, al que llegan entre 2.5 millones y tres o mas cada año a rendirle tributo a la Virgen Dolorosa, que por disposición de la Dioseis correspondiente, es nombrada la patrona de este pueblo católica, y tal es su importancia que este viernes, más de cinco mil peregrinos escucharon la homilía de voz del obispo Fidencio López Plaza, ahí en la extensa plaza de Soriano que se vio impresionantemente llena.
Pero no todos tienen que ir a Soriano a rendirle tributo a la Dolorosa, en Querétaro como año con año se montó un altar en donde se exponen una bella imagen de la virgen de los Dolores, y la gente se hace llegar a este lugar en donde también se pone un cristo crucificado, hoy acompañado de un diseño arquitectónico al estilo del arquitecto Tres Guerras, con el arco en donde reposa el Neptuno que es una pieza única y de los Queretanos.
Es así como esta celebración en la que participan los fieles católicos, se toma como el acompañamiento a la madre del Señor, en su sufrimiento.
Este viernes de dolores o viernes de concilio, es un día en el que la celebración tiene varias características y celebraciones diversas, misas, peregrinaciones, paraliturgias y vigilias entre otros asuntos que tienen que ver con las celebraciones religiosas… mientras tanto Colón sigue de fiesta y así seguirá hasta terminar la Semana Mayor.