EL RÍO SAN JUAN, ALAMEDA URBANA

San Juan del RíoÚltimas Noticias
Vista: 155

La continuidad no es un asunto ideológico, sino un tema social, que beneficia a todos. San Juan lo requiere.
El Río San Juan, gran pulmón de y para los sanjuanenses, debe cuidarse y repoblarse de masa vegetal.

Ahora que fenecen las fechas en que el alcalde y sus colaboradores terminan de informar de lo que se ha realizado durante el cuarto año de gobierno al frente del municipio de San Juan del Río, un territorio queretano con más de 77 mil hectáreas de extensión y con proyectos de índole federal y estatal que se tienen prometidos para los próximos meses, sería importante también fortalecer, como se ha venido haciendo, pero también focalizar los 21 kilómetros de río que tiene en custodia el municipio, y que convierten a este efluente en una gran alameda lineal que pueden disfrutar propios y extraños.

Es importante detallar que el bosque es verdaderamente escaso, aunque algunos datos hablan de la existencia de más de 1,300 hectáreas, y tal vez esto se refiera a los escasos árboles que existen en algunas zonas, o bien en las comunidades limítrofes con Amealco y Escobedo, como El Coto y Santa Isabel El Coto, o bien algunos de Los Potrerillos, Tunamanza o La Laborcilla.
En las elevaciones más cercanas a la zona urbana —que ya han sido rodeadas y agredidas por los propios habitantes—, como el Cerro de la Venta y Cerro Gordo, solo existen algunos ejemplares de árboles endémicos que se han negado a perderse.

Este es un municipio que tiene tierras de cultivo, y cuya agricultura, hasta antes de los años setenta, era junto con el comercio la columna vertebral de la economía de las familias.
La industria era efímera y hoy es un portento, dando empleo a unos 25 mil sanjuanenses, que a la vez han provocado la expansión urbana tanto en comunidades como en la cabecera municipal, en donde los barrios y las colonias suman cerca de 400.

Su superficie sembrable de temporal alcanza las 38 mil hectáreas y las 8,900 de riego, que reunidas con las de Escobedo, El Marqués y Tequisquiapan, conforman el Plan de San Juan del Río.
Este alcanza más de 12 mil hectáreas que gozan de las aguas que se extraen de más de 66 pozos profundos, perforados de acuerdo con el plan hídrico que genera la Presa Constitución de 1917, la más grande del estado.

A todo esto hay que agregar que no se tiene registro de cuántos bordos y presas más tiene San Juan del Río, ni cuánta agua en total se detiene, pero lo que sí es cierto es que el agua potable llega a los hogares con eficiencia y calidad, gracias a la extracción que se hace del subsuelo.
El municipio también cuenta con zonas de agostadero, que alcanzan las 27 mil hectáreas.

El Río San Juan, cada que llegan los tiempos de lluvias, genera preocupación en algunas zonas aledañas al efluente, cuyo cauce puede transportar unos 90 metros cúbicos de agua por segundo.
Pero esa agua arrastra basura, troncos, piedras, árboles caídos y todo lo que encuentra a su paso.
Se ha ido mejorando la infraestructura con obras de mitigación para evitar inundaciones en algunas zonas. Las inversiones han sido millonarias, pero han dado resultados.

Es menester que los grupos ambientalistas, la sociedad civil, las dependencias e inclusive Ecología del municipio y del estado, pongan sus ojos en las márgenes del Río San Juan.
Las obras, cuando se les da continuidad, dejan de ser obras de ideologías para convertirse en obras de los ciudadanos.

Al río, desde luego, le hace falta fortalecer su masa vegetativa, programas de repoblación y evitar los cambios de uso de suelo en zonas bajas para impedir que las crecidas del río generen inundaciones.
Y esto no quiere decir que se detenga el crecimiento urbano; de hecho, desde antes de la llegada de los españoles, ya aquí era una ciudad y un centro de concentración y negociaciones entre imperios y tribus vecinas, lo dicen arqueólogos y antropólogos que han encontrado vestigios de diferentes culturas.

San Juan del Río está llamado a ser una ciudad de grandes expectativas y desarrollo.
La zona metropolitana, que comprende los municipios de Querétaro, Huimilpan, El Marqués y Corregidora, tiene que acentuarse, porque las bondades de San Juan del Río y sus ventajas en comunicaciones y servicios atraerán inversión, nuevos servicios y plazas comerciales.
Pero el río hay que cuidarlo y hasta apapacharlo, porque es un gran pulmón lineal que no debe descuidarse.

Tags: #alameda, #ríosanjuan, #sanjuandelrio, bitacoradiario

Autor

HÉCTOR MAGAÑA CONTINÚA CON SU INFORME
LA GRILLERA
Portada Bitácora Diario Edición 1589
EDITORIAL
Sigue nuestras redes sociales
Instagram
YouTube
Telegram