Por Raúl Rosillo Garfias
El parque ecológico Gonzalo Río Arronte, no cambia de nombre ni tampoco deja de ser la sede del DIF Municipal, destino que le dio el gobierno de Gustavo Nieto y Tania Ruiz, en su tiempo de gobierno municipal, luego ahí se conservó… El gran domo de acrílico que es la figura central de este parque, tiene destino y tiene proyecto, ya lo conoce el gobernador Mauricio Kuri… se le entregó ya el proyecto ejecutivo.
El destino fue atender, a los niños y enseñarles a querer al medio ambiente, el gran domo sería un gran mariposario, se trataba de tener un clima controlado, y ahora este espacio que se encuentra cada vez más al centro de San Juan del Río, pero dentro del parque industrial Valle de Oro, nunca fue abierto al público, ahora según lo que se ha filtrado se pretende que tenga un lago interactivo, que el domo cambie de colores, que haya oficinas administrativas y que continúe siendo el Parque Ecológico Gonzalo Río Arronte, un personaje grande para San Juan del Río, y verdadero impulsor con otros personajes de la vida de esta ciudad de la industria y del desarrollo.
Hoy este parque ecológico, alberga las oficinas del DIF Municipal, pero también tiene ya entre sus instalaciones el Centro Gerontológico que albergará el servicio a 9 municipios del estado, las plantas que se encuentran protegidas por el domo, también serán reubicadas y acondicionadas para que no mueran y sigan siendo extraordinarias… es más en el centro de este domo en su piso, hay una gran ceiba que cada vez se ve más majestuosa y apunta perfectamente al centro alto de este.
Es un icono este parque ecológico y a partir de este próximo mes de octubre, será ya el centro Gerontológico el segundo más importante de Querétaro y con capacidad para atender la demandas de 9 municipios del estado… su transformación se irá dando por etapas y por pasos.
Este parque ecológico hasta donde sabemos, fue un proyecto del arquitecto Martín Tejada Sinecio, que se dio a la tarea de construir arcos sin estructura de fierro en su interior, sino con piedra acuñada y con una corriente de agua en su cima para mantenerlos de pie y sin deterioro.