Joaquín Antonio Quiroz Carranza
El Ahuehuete
Toda persona, independientemente de su origen étnico, condición educativa o socioeconómica, si labora para una entidad privada o pública, en automático establece una relación laboral y cuenta con los siguientes derechos:
Recibir un salario, conocer la duración de la jornada de trabajo, días de descanso pagadas, vacaciones pagadas, aguinaldo, liquidación y/o pensión, es indispensable que exista un contrato por escrito y que sea del conocimiento del trabajador sin que puedan establecerse diferencias por motivo de raza, nacionalidad, sexo, edad, credo religioso o doctrina política. El trabajador no puede ser privado de los derechos que deriven de la relación de trabajo y de los servicios prestados.
Señala la Ley que por cada seis días de labores, el trabajador disfrutará de un día de descanso con goce de salario íntegro. Según el artículo 76 de la Ley Federal del Trabajo, los trabajadores que tengan más de un año de servicio disfrutarán de un período anual de vacaciones pagadas y que no podrán ser inferiores a seis días laborables. Dicho período, aumentará en dos días laborables, hasta llegar a doce por cada año subsecuente de servicio. Después del cuarto año, el período vacacional aumentará en dos días por cada cinco años de servicio. Los trabajadores tendrán derecho a percibir un aguinaldo anual equivalente a quince días de salario, por lo menos y deberá pagarse antes del día 20 de diciembre. Las relaciones de trabajo pueden ser por obra, tiempo determinado o por tiempo indeterminado. A falta de estipulaciones expresas, la relación será por tiempo indeterminado.
Éstas y otras consideraciones son violentadas y letra muerta para el Gobierno del Estado de Querétaro y el sector salud federal, puesto que en el Centro de Salud con Servicios Ampliados AMEALCO laboran médicos tradicionales indígenas como eventuales, como es el caso de Don Atanasio Vázquez Lucas con número de trabajador 110964 con el puesto de “Medicina tradicional” rama “Paramédica”, quien labora en ese centro desde hace más de 8 años sin contrato, vacaciones, aguinaldo, ni posibilidad de jubilación, lo anterior bajo el argumento de que su especialidad no está certificada en el registro del sector salud, lo que es el colmo, puesto que entonces su incorporación al centro de Salud viola otras tantas regulaciones.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador ya esta enterado de la situación, pues la Periodista Martha Obeso, Directora de la Revista Naturopatía, denunció la situación en la conferencia “Mañanera”, y AMLO pidió al Secretario de Salud que atienda el caso, éste lo transfirió a otra área del sector salud y la bolita sigue girando sin que se de solución adecuada y definitiva.
Como ha dicho AMLO, basta de simulación, basta de funcionarios corruptos, racistas y clasistas.
La derecha se queja de que vendrán médicos cubanos a México y no se atiende a nuestros médicos ancestrales. Si la derecha no quiere que los comunistas cubanos vengan a contagiarnos de los preceptos y de la ideología “Castro-Díaz Canel-comunista”, es muy simple que se aproveche la riqueza de la medicina tradicional mexicana.