Por Raúl Rosillo Garfias
Hoy y siempre la providencia ha estado del lado de los más fuertes… y parece que los pobres entonces deberán conformarse con frases como el “Bien Común”, “La Justicia Social”, “Patria para Todos”… y lo más nuevo “la Esperanza de México”… y con todo eso parece que la sociedad monta en su brioso corcel y se encamina a todo galope al infinito.
Esta sociedad y desde siempre, remitiéndonos un poco a su historia Mexicana… carece de nociones de lealtad… sólo baste voltear los ojos a ver el comportamiento de los integrantes de los partidos políticos, en este y en todos los tiempos, como cambian de uno a otro, porque no se cumplen sus caprichos o porque no apuntalan sus intereses.
La vaguedad de nociones de lealtad, están aderezadas desde luego con vagas nociones de historia y sobre todo de las paradojas de esta en su devenir… por tanto la formación en este tiempo de los nuevas generaciones esta carente de ideología, de doctrina, de compromiso, de sueños mayúsculos para la patria y con la patria para todos…
En la Iglesia y en la Política, los pobres se condenan y los ricos encuentran la salvación…
Dicen los estudiosos de la conducta humana, que los seres humanos no deben tomar decisiones con hambre, ni con sueño, tampoco enfermos, ni con prisa… y mucho menos pasados de copas o borracho, siempre hay que acudir a la serenidad, al espacio solitario y ambiente tranquilo, saber que en cada esfuerzo existe una decisión, que puede ser acercada o equivocada…
La vida siempre vigilada por el método científico…y siempre en el ensayo y error… parece pasar desapercibido al paso de la observancia… lugar ideal para la toma de decisiones… el devenir de las ideas es una cascada constante de oportunidades y el único responsable de tomar una u otra es cada cual y cada quien…
