Por Raúl Rosillo Garfias.
Los seres humanos, y más los amantes de la política nunca están en la región del nunca… cada instante puede modificar el futuro, o que quiere decir que hay que dejar de existir para el temor y hay que vivir para la acción y el trabajo que tenga como propósito modificar el mundo, pero esos hombres, esos jóvenes que se formaron en las universidades, en las normales, en los tecnológicos, que lideraban el pensamiento y que dirigían a los jóvenes que se insertaban en los partidos y daban el debate de las ideas en todos los foros, esos jóvenes llegaron a las cámaras de diputados y de senadores, algunos fueron gobernadores o bien dirigentes…pero algo le paso al mundo y a los partidos y ahora no están en ninguna parte o no les interesa la vida partidaria…
Hoy que la sociedad, requiere de tener buena comunicación política esta es errática y sin sustento, no emociona, no tienen agenda, no tienen narrativa, no cuentan historias creíbles, no despiertan la esperanza no hay quien defienda a los que critican, tampoco a los que proponen, el insulto inclusive desde el más alto nivel de la jerarquía de gobierno, es la síntesis que se vive, que ahora pretende regir la política editorial de los medios, para terminar con el contenido creíble, y se tienen líneas de pensamiento que la idea es polarizar más a la población para seguir polarizando y dividiendo, con falsedades, como los recursos que se entregan en los programas sociales, con lo que dicen que ya se terminó la pobreza, cuando son pensiones que se tienen que gastar en medicinas, en educación o bien en vivienda…
El periodismo como nunca debe seguir libre y convertirse en el contrapeso de las decisiones de los gobernantes, sean del color que sean…porque de ahí surge la palabra medios… Somos el puente de comunicación de la sociedad, pero también el eco del gobierno cuando este hace las cosas bien… es el espacio de crítica y de observación, pero también de reconocimiento a lo que se hace o deja de hacerse… es cuánto…