Bitácora 677.-
Por Raúl Rosillo Garfias
Los estudiosos del mundo y la teoría política, destacan que ha llegado el momento de rescatar la ideología de centro izquierda, que fue la que profesó el PRI desde su nacimiento y que poco a poco, con la llegada de los tecnócratas a las posiciones de gobierno y del partido la fueron orillando a la derecha… dicen los estudiosos que si se quiere tener un partido vivo, con mucho hay que corregir el rumbo… que tanto están dispuestos los actores de este partido y de otros… es ahí en donde hay que aplicar los conocimientos de la política… el acuerdo, la negociación el ceder y conceder… el hacer de verdad del ejercicio de la práctica política la calle de doble sentido…
Es menester determinar desde entonces que el país, es un ente superior a todo y a todos y que está antes su interés que el de los Partidos Políticos, sean del color que sean, de los intereses de unos y otros… hasta alcanzar los estándares de lucha que permitan los equilibrios y los pesos y los contrapesos y el cogobierno con los medios de comunicación y la sociedad…
Cuando los partidos dependen de las decisiones de los gobiernos desde las células básicas, los seccionales, los comités municipales, los estatales y hasta el nacional, que ha perdido su independencia y ha dejado en el olvido los acuerdos a valores entendidos, se inicia la picada y caída estrepitosa de los partidos… solo hay que voltear a ver al PRI y lo entenderán de inmediato… camino que puede seguir en poco tiempo el PAN… que está en esa condición de perderse si no se toma en cuenta a las bases y a la gente que opina en todos los niveles.
Cierto es que hoy el futuro de las comunicaciones tiene que ver con el universo digital… pero en política sigue siendo necesario estar frente al ciudadano, para que este entienda que está con un par y que puede cuestionarlo, y que puede opinar y que puede inclusive reclamar o ponderar lo que se ha hecho bien o mal…
En los medios de comunicación, es tiempo de contenidos, cortos, contundentes, no sólo en tiempos electorales, sino que ya será así la métrica de la comunicación, que garantice el derecho a la información… o sea que no debe perderse el sentido de esta… prevenir, informar, educar y destacar lo buen y lo malo…
Y bueno los ciudadanos estamos entonces ya obligados a discriminar entre lo cierto y lo falso… y para ello hay que prepararnos para entender la dinámica de la información actual… estamos más desformados que informados…