Escribe:-CondeNando
Fiesta de nuestro país para recordar a los difuntos, íntima y espiritual en sus inicios, ritual canibalístico: recordemos las calaveritas de azúcar con nombres propios, también al zompantli prehispánico (pirámide de cráneos), el Mictlán o tierra de los muertos, las leyendas macabras de la Colonia, la Catrina de Posada: burla a la aristocracia porfiriana y las calaveras literarias con su ironía y burla-homenaje de personajes. El humor negro de los mexicanos transmutado en el falso lema: “Nos burlamos de la muerte porqué no le tememos y nos hace los mandados “cuando es al revés: sublimamos nuestro miedo disfrazándolo de burla, nos reímos de ella para no temerle, la transformamos en la “Santa Muerte” a pesar del veto eclesiástico a su culto y este sincretismo se concretiza en las monjas coronadas. El cine ha sido el gran divulgador y distorsionador de este rito: recordemos la gran película “Macario” basada en una leyenda medieval, recuperada por los hermanos Grimm y luego por el escritor también alemán B.Traven quién situó la historia en nuestro país y con nuestras costumbres, mientras Gavaldón la popularizó en la pantalla; otras cintas mexicanas también lo hicieron respetando el ritual; luego llegaron películas extranjeras como “Bajo el volcán” y “Hombre en llamas”, pero es en la cinta de James Bond “Spectre” dónde aparece como intro, ya con espectacularidad hollywoodense (la verdad fue lo mejor de esta cinta fallida y aburrida); a raíz de esto se realizó el primer desfile carnavalesco de calaveras tratando de emular la escena de la película ; también apareció el día de muertos como tema en la cinta animada producida por Guillermo del Toro: “El libro de la vida” , hollywoodense al confundir lo español con lo mexicano, parte de la ignorancia del cine gringo al reflejarnos. También llegó a los cines “Coco” con un gran respeto por nuestras tradiciones y el desfile internacional de Día de Muertos en la ciudad de México este pasado domingo. En estos días se estrenó la cinta mexicana animada “Día de muertos” la cual esperamos respete la tradición y la divulgue más. “Los muertos vivos están . . .”