*** Este sin duda es un gran tema para el Congreso del Estado, que si legislan para la protección de personas mayores, pero no lo han hecho para los cuidadores de estas y de los enfermos.
Por Raúl Rosillo Garfias.
La Organización Mundial de la Salud, tiene como fecha para honrar a las personas cuidadoras este cinco de noviembre, fecha que se establece, el pasado 2014, y en donde se destacan algunas estadísticas, algunas preocupantes y otras verdaderamente con sentido humanitario, que poco o nada se valoran por parte de los ciudadanos e inclusive son pocas las políticas públicas que existen en esta materia para premiar ese esfuerzo y esa dedicación, pues la mayoría de los cuidadores no reciben remuneraciones.
El propósito de esta conmemoración y el por qué se toma un día para honrarlos, es para que se visualice el rol que juegan y el impacto que tienen en la sociedad, sobre todo el de aumentar la conciencia pública sobre los retos emocionales que enfrentan, y la falta de políticas públicas a las que hay que empezar a acudir para que se les tome en cuenta.
Las personas cuidadoras, enfrentan muchos desafíos, los más trascendentes es que fácilmente pueden ser calificados como agresores o como gente que no cumple con el perfil para atender a las personas, y se olvidan del estrés, el agobio, la falta de apoyo económico y social, así como el impacto directo en su propia salud al cuidad a un enfermo o a una persona que ya no puede vivir sola.
Según la organización Mundial de la Salud, la mayoría de los cuidadores son mujeres y alcanzan cifras entre el 60 y el 70 por ciento, a nivel mundial y se estima que una de cada diez personas, que realizan este trabajo no tiene remuneraciones económicas, y cargan con cuidados como aseo personal, alimentación limpieza, tratamientos médicos, y controles sobre enfermedades crónico degenerativas entre otros asuntos.
Las personas cuidadoras, también enfrentan otros asuntos, como los permisos laborales que deben pedir para atender los cuidados de sus seres queridos, no tienen subsidios, falta también capacitación para el tratamiento de estos temas, educación para saber lidiar con los asuntos que esto representa y desde luego generar una red de apoyo que les ayude a mejorar las técnicas y las formas para atender a las personas… En conclusión, en este día las personas cuidadoras, deberían ser cada vez más reconocidas por la sociedad, pues sus trabajos y cuidados quedan muy entre muros y poco se conocen o se hacen visibles estas historias.