Por: Raúl Rosillo Garfias
De verdad que hay que estar agradecidos con los ciudadanos, sobre todo con aquellos que han empezado a confiar en Bitácora diario, con casi 87 mil seguidores, eso habla de la fidelidad que ha ido logrando este medio informativo en una sociedad que a juicio de quien esto escribe existen unos 400 mil habitantes en la demarcación, con un buen grado promedio de escolaridad, arriba de 9, según los datos del INEGI.
Dicen los filósofos y los estudiosos de la conducta humana que no hay nada más peligroso que la autoridad en manos de quienes no saben usarla… J.J. Rosseau… y la verdad luego de lo que ha sucedido en Querétaro y en San Juan del Río, de la escasa seguridad pública por la falta de cultura de la propia población… pero también por la muy débil identidad de la patria chica… Las cosas están así… y aunque nos dicen que hay mucha seguridad y que hay acercamiento, la verdad es que el mero mero de la policía vive más en su rancho que en San Juan del Río… y reporta en otro lado antes que al alcalde…
El caso es que ahora le toca la crítica al IQT, si al Instituto Queretano del Transporte, que dice que vigila, que supervisa, que está al tanto de que las unidades estén en buen estado, que le den un servicio pormenorizado a los ciudadanos… estos ciudadanos que se desplazan en estas unidades manejadas por verdaderos cafres, que lo mismo se pasan una luz roja que un tope a la velocidad que vienen, como si no trajeran seres humanos bajo su responsabilidad.
La realidad es que ante la calidad del servicio que ofrecen, muchos pasajeros también sin conciencia y sin sentido de pertenencia, destruyen, rayan, lesionan, agujerean lo que les viene en gana en las unidades… y hoy recibimos verdaderas joyas de fotografías respecto a cómo está casi todo el transporte urbano y suburbano en San Juan del Río…
Uno de los talones de Aquiles que han tenido las autoridades estatales y municipales, es la regulación del transporte público… no se paran en los lugares asignados, destruyen el paisaje urbano que se construye para ellos, pasan a la hora que quieren, se dejan ir a velocidades que no están permitidas… pero como no hay unidades de tránsito más que para perseguir motonetas y motocicletas, se olvidan de otras responsabilidades, pero eso si las infracciones por las nubes…
Pero que se hace con los apartados de lugares en casi todas las calles, que se les dice a los comerciantes porque quieren tener ahí su vehículo a la puerta del negocio para facilitar su movilidad… mientras que el trabajador común tiene que usar unidades destartaladas, feas y mal aseadas… urge que se tomen cartas en el asunto…