Por: Jerónimo Gurrola
Como no queriendo, al hacer la propuesta del nuevo Proyecto de Egresos de la Federación, salió a la luz la deuda contraída por el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, a pesar de que éste se comprometió, como hacen todos los políticos, a no endeudar el país.
Como candidato, su promesa fue no endeudar a México. “No vamos a aumentar impuestos, no va a crecer la deuda pública, no vamos a endeudar al país, no van a haber gasolinazos”, decía. “La fórmula es sencilla: acabar con la corrupción y con los privilegios en el gobierno”, repetía.
Con el tiempo, fue modificando su discurso. En septiembre de 2023, ante la imposibilidad de tapar el sol con un dedo, reconoció la deuda al declarar que no iba a dejar al país, con “un gran endeudamiento”, como ya advertían varios analistas.
Los neoliberales “Andan buscando los gazapos, las podridas, pero ya estamos acostumbrados a esto”, replicó López Obrador en una de sus mañaneras, en Palacio Nacional.
“No hay endeudamiento”, insistía, pero al mismo tiempo se descubría al decir: “Cada año se considera un porcentaje para contratación de deuda a partir de lo que se piensa, va a ingresar por recaudación. Puede ser que haya un déficit, entre lo que ingresa y lo que se requiere para hacer las obras”.
Sin embargo, al final de su sexenio AMLO dejó a México empeñado, con una enorme deuda pública, según la propia Secretaría de Hacienda, con 6.6 billones de pesos, 2.9 puntos porcentuales del PIB a julio de 2024, con lo que la deuda total ascendería a 16 billones 405 mil millones de pesos, equivalente al 49.7% del PIB.
Las deudas del gobierno, como todos sabemos, al final de cuentas terminamos pagándolas todos los mexicanos con nuestros impuestos.
Si consideramos que el gobierno ahora de Claudia Sheinbaum, continuadora de la política de la “honestidad” y de la “austeridad republicana” de la 4T, propone en su Proyecto de Egresos de la Federación de 2025, destinar 836 mil millones de pesos supuestamente para acabar con la pobreza, nos va a salir más caro el remedio que la enfermedad.
¿Cuál es la diferencia entre los gobiernos de Morena y los gobiernos de los otros partidos? ¿Qué hemos ganado los mexicanos con la 4T, que no sea demagogia, pobreza y muerte? Como dijo el indito… “¡todos pior!”