Por: Andrea Peña
Este año las ventas de ropones para vestir al Niño Dios en San Juan del Río están por debajo de lo esperado, la recesión económica y aumento de precios, ha generado que algunos sanjuanenses hagan a un lado la costumbre de vestir al Niño Dios como lo marca la tradición católica, de acuerdo a comerciantes de la zona centro de la ciudad
La señora Guadalupe Cortés, comerciante de temporada que se encuentra a un costado del Jardín Independencia, comentó que las ventas han caído hasta un 60 por ciento, ya que ocilan entre unos 800 y mil pesos al día.
“Las ventas hasta este momento van tranquilas, vamos saliendo de una pandemia que nos afectó bastante al comercio, estamos apenas regresando a las tradiciones de año con año, y yo creo también por la reubicación que nos hizo el gobierno, ya que nosotros años pasado nos colocábamos en el Mercado Juárez”, indicó Lupita,
Y es que el gobierno del alcalde Roberto Cabrera le ha dado la oportunidad a los comerciantes de temporada de ubicarse en la calle para impulsar la economía local.
Comerciantes de ropones para vestir al Niño Dios en San Juan del Río esperan un repunte en sus ventas, ante la cercanía de las festividades de la virgen de la Candelaria a realizarse el próximo 2 de febrero.
La variedad de vestidos es amplia, pues existen más de 100 modelos, que van desde los 200 pesos hasta los 480 pesos ya que depende mucho del tamaño, desde los 4 centímetros hasta de 60 centímetros.
“Nosotros somos la Unión de Fiestas Tradicionales de San Juan del Río, su servidora lleva alrededor de 35 años siendo comerciante, tenemos fe que esté 2023 será un mejor año para el comercio”, precisó.
Locataria sanjuanense dijo que la inversión para adquirir un niño Dios por primera vez, es cercana a los mil 500 pesos, esto si el cliente adquiere un niño de dios de yesos de 65 centímetros, siendo este el más comprado por los fieles creyentes.