Por: Baldomero Pérez
@tojolobaldo
EL PODER DESHUMANIZADO
“Los niños enjaulados en EUA” es una imagen que ofende, conmueve, indigna y nos alerta sobre las amenazas a la libertad y los derechos humanos.
La política de “cero tolerancia” del gobierno de Donald Trump en temas migratorios atenta contra el sentido más profundo de una política para hacer comunidad o política para procurar la convivencia social. Quizá soy muy romántico y me quedo con la clásica acepción del “zoon politikon” como naturaleza política de la humanidad, pero en realidad estamos ante la deshumanización del poder, es decir, la dignidad de la persona queda en segundo lugar ante los intereses multilaterales y las manifestaciones fascistoides de un gobierno que goza ante el llanto de la niñez.
La humanidad así, no tiene futuro, es más grande el ego, la supremacía política, el cálculo electoral y el amago institucional, que cualquier muestra de solidaridad con los ciudadanos del mundo. La migración es una consecuencia al deseo de supervivencia en cualquier grupo social que no encuentra alternativas de desarrollo en sus lugares de origen. En las jaulas hay niños mexicanos, centroamericanos y seguramente de otras nacionalidades (aún están en proceso de aclarar las nacionalidades), el mundo se reúne en Rusia, los mexicanos se vuelcan ante el grito de gol, y muchos otros están en plena guerra electoral, es tiempo de ser más conscientes de lo que sucede en nuestro entorno.
En este mundo están en peligro de extinción los humanos, queremos paz y hacemos la guerra; creo que es momento de hacer un alto en el camino y reflexionar cuál es nuestra responsabilidad ante un mundo indigesto, quizá tenemos el poder en el revolotear de una mariposa o en el alcance de un tweet, no lo sé, pero vale la pena intentar ser más humanos y manifestarnos contra lo que realmente es indignante.
