Por Raúl Rosillo Garfias
Cuando el o los partidos políticos lograban ponerse de acuerdo determinaron desde el Congreso de la Unión que debían desaparecer la multiplicidad de planes de desarrollo, y debía tener un Plan general a nivel nacional como eje rector y que de él se desprendieran los necesarios para cada entidad primero y luego del estatal los municipales, y así quedaban cubiertos los tres ordenes de gobierno…
Entonces los políticos y los urbanistas, la gente de los diferentes estratos sociales llego a comprender que la tierra podría tener un destino económico y otro social… y determinaron que el espacio rural y urbano son y deben considerarse también espacios de la equidad de la igualdad y de la justicia social o del bien común según el slogan de cada partido político.-
Se desprendia entonces que la tierra tenía un sentido económico para la industria y el comercio y claro algunos otros tipos de negocios, mientras que el aspecto social son la vivienda, espacios para preservar el medio ambiente y la recreación.
Así el espacio urbano, considerado el espacio geográfico donde el ciudadano desarrolla sus actividades cotidianas, como habitación, circulación recreación y trabajo, se convierte en una zona ampliamente habitable… sin ser pitonazos ni adivinos, ni ir mucho a fondo en la historia, es necesario que los políticos modernos se empapen de todas estas condiciones de los centros urbanos, de los espacios rurales, para que las propuestas tengan sustento y tengan también apego a algunas ot4ras observaciones que no precisamente tienen que ser académicas.-