Bitácora 676.-
Escribe.-Fernando Roque
Este 5 de agosto se cumplió un aniversario más de la muerte misteriosa (nadie sabe, nadie supo) de la diva más perdurable del cine. A continuación un breve texto en su memoria: “El oro del champagne en su cabello se desliza cual lava derretida, sus ojos de sirena seductora: dos grietas a punto de cerrar, las pestañas: dos pétalos dormidos, las cejas. alas de gaviota a punto de volar, lunar: solitario y negro diamante, náufrago perdido en el océano de su rostro y su boca: clavel abierto por la luz de la mañana para mostrar marfilinos dientes, que son alba puerta a mil placeres, mientras la risa es promesa de paraísos perdidos en la blanca superficie de una piel de diosa, como playa de nívea arena seducida por las olas del deseo, luz repartida por un prisma en una hilera de colores, perla devuelta por el mar, rosa destrozada por el viento, mariposa despedazada por las garras de la fama“.